04 dic. 2023

Benjamín Fernández Bogado

Benjamín Fernández Bogado – www.benjaminfernandezbogado.wordpress.com
Benjamín Fernández Bogado – www.benjaminfernandezbogado.wordpress.com
Si algo domina el ámbito político es no saber cuándo se resolverá el nudo gordiano de nuestra democracia y quién lo cortará. Para algunos que esperaban que fuera EEUU, se quedaron un tanto decepcionados porque después de las duras sanciones del Departamento de Estado y el del Tesoro no vino la acción judicial contra el “significativamente corrupto”.
Benjamín Fernández Bogado – www.benjaminfernandezbogado.wordpress.com
La falta de ideas, pero fundamentalmente de vergüenza, ha inundado por completo el quehacer político local que no hay frenos a los exabruptos y vulgaridades con las que pretenden muchos distraernos de las cosas importantes. Las mismas, que no pueden ser tratadas por muchos de estos que llegaron a caballo, de castigar el sistema, y para consolidarlo en su decadencia, otros.
Benjamín Fernández Bogado – www.benjaminfernandezbogado.wordpress.com
En menos de 100 días el gobierno de Peña ha enfrentado severas pruebas de estrés donde no ha conseguido demostrar que él más que nadie tiene el control del gobierno. Con los reclamos judiciales en Paraguay, Brasil, EEUU y Colombia a su mentor y con los problemas internos y externos, ya lleva menos de dos meses demostrando que cualquier oportunidad de salirse de los líos viajando o una cantinflada es su mejor opción.
En la narrativa de la democracia siempre se habló de mayorías y de minorías, al punto que ella se legítima tras unos comicios en la manera en que esta última es integrada al sistema de gestión de gobierno y de acceso de oportunidades para la gente.
Benjamín Fernández Bogado – www.benjaminfernandezbogado.wordpress.com
Cuando uno ingresaba a un cuartel para el servicio militar, uno seguía un ritual de despersonalización y de humillación para construir un ente uniformado, vertical y sometido. Pero lo más sorprendente para mí fue encontrarme con la representación de una persona que al grito de: ¡Número!... Cumplía las órdenes y mandatos de un superior. Ese “número” no tenía nombre ni apellido y era parte integral de un cuerpo. Eran muchos pero despersonalizados.
Benjamín Fernández Bogado – www.benjaminfernandezbogado.wordpress.com
Arrancó el juego para Peña. Deberá demostrar primero que es él quien manda y no su mentor o promotor. Puede disimular por un tiempo mostrando el rostro amable de un gobierno que tiene serios pendientes acumulados y que requerirán mucho carácter y valentía para enfrentarlos.
Así definió al senado el legislador “Chaqueñito”, una de las joyas que Payo Cubas metió en el Congreso con el ánimo de demostrar que el sistema democrático no funciona.
Eso es ponerse en la condición del otro, sentir lo que siente y no solo buscar, entender el problema sino resolverlo. Por esta razón, Peña desplazó a su recién nombrado ministro de Salud, Felipe González, quien cometió una boutade al afirmar que hay casos en que la medicina no tiene nada que hacer y es mejor no luchar por la vida de esa persona.
Largos años de sometimiento han logrado que una gran parte del país haya hecho de la indignidad su blasón. Cuesta mucho llegar a ser mendigo.
Es común referirse en democracia al rol de los protagonistas de la vida pública como parte de un delicado equilibrio que requiere un nivel de madurez y sensatez en su ejercicio. La elección de autoridades del nuevo congreso nos demuestra que la idea central de un poder que controle al otro es un factor esencial en democracia. Algo que no tendría que ser recordado. Sin embargo, los argumentos de los mal llamados opositores de dar al ejecutivo el control del legislativo nos muestra el escaso interés de ejercer de contralores y lo atractivo que resulta montarse al carro presidencial para provecho personal y de su camarilla.
La prueba de medir la resistencia de las instituciones ha sido la constante en nuestra inacabada transición hacia la democracia.
La democracia se jalona de batallas continuas en una guerra contra la ignorancia, la brutalidad y el dolor. Ella requiere permanente atención porque carga en su organismo los gérmenes que quieren acabar con ella.
493
Esa es la cantidad en dólares que invirtió el año pasado el Paraguay por cada uno de sus más de 1.500.000 alumnos matriculados.