El presidente Mario Abdo Benítez viajó este miércoles hasta Emboscada para verificar las obras del nuevo centro penitenciario. Ahí conversó con los medios de comunicación sobre varios temas.
Abordado por su postura silenciosa ante los hechos de corrupción denunciados durante la pandemia del Covid-19 y un eventual apañamiento de los actos en el marco de la unidad colorada, el mandatario aseguró que él “no puede meter preso a nadie”.
“La corrupción no depende del Ejecutivo, está la Fiscalía y el Poder Judicial. Yo no le puedo meter preso a nadie. Hemos avanzado en un Poder Judicial independiente, tenemos cinco nuevos ministros. Sin gritar, sin amenazar está gente bien puntuada. Esto es un proceso y cada uno cumple su rol. Criticamos la cultura autoritaria, pero queremos que el presidente se meta en todo”, respondió con incomodidad el mandatario.
Lea más: Instan a que la unidad colorada no apañe a la impunidad
Abdo Benítez también fue abordado sobre el acercamiento con el ex mandatario Horacio Cartes y algún pedido que este le pudo hacer como condicionamiento. Al respecto, aseguró que no le pidió nada y que seguirá en contacto con él, así como con los líderes de la oposición.
“No cedemos absolutamente nada. Es algo necesario buscar la reconciliación y un trabajo coordinado entre las fuerzas políticas. Las divisiones no generan previsibilidad y estabilidad. Para que el capital se invierta, haya desarrollo, la clase política tiene la obligación de generar un buen ambiente para la reactivación económica”, reiteró.
El jefe de Estado aseguró que esta no es la primera vez que trabaja de forma coordinada con el ex mandatario Horacio Cartes. Al respecto, recordó que “a pesar de sus diferencias” trabajaron juntos para las elecciones generales.
Relacionado: Cuestionan que proyecto de ley podría liberar solo a los corruptos
“Yo puedo tener diferencias con cualquiera, pero hoy mi responsabilidad es mayor. De nosotros depende superar diferencias para tener una mayor recuperación”, aseguró.
El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, tiene el gran desafío de conseguir la aprobación de un nuevo paquete de deudas para su plan de reactivación económica, lo que depende de los consensos políticos que puedan lograr en el Congreso.
