21 dic. 2025

La narcopsicosis

Este país vive tiempos de narcopsicosis. Los habitantes del Gran Asunción sienten hoy el mismo desasosiego que los del Amambay conocen desde hace treinta años.

Algunos advierten que nos estamos “mexicaneando” sin percibir que en el resto del Cono Sur se discuten mejores políticas anti tráfico para evitar que sus países se “paraguayicen”.

Lo que ha ocurrido en la comparecencia del ministro del Interior ante la Comisión Permanente del Congreso es sencillamente brutal. Arnaldo Giuzzio, cuya performance en el cargo es muy criticada, aprovechó los minutos de atención de toda la prensa nacional para ejecutar una excelsa huida hacia adelante. Profundizó su denuncia contra Horacio Cartes explicando la ruta de la venta de cigarrillos, el movimiento de dinero, el lavado de las ganancias y la supuesta connivencia con bandas criminales de otros países. De todo esto se habla desde hace años, pero es diferente cuando lo dice un ministro en un ámbito parlamentario. Sus palabras adquieren un barniz de institucionalidad y pueden convertirse en notitia criminis.

En un país normal la Fiscalía General del Estado estaría sumamente interesada en investigar las gravísimas acusaciones vertidas contra un ex jefe de Estado. Aquí, todos saben que Sandra Quiñonez no hará nada. De hecho, casi todo lo que expuso Giuzzio ya había sido denunciado por una Comisión Bicameral de Investigación. El contundente informe sobre los hechos punibles cometidos por Darío Messer y Horacio Cartes fue remitido al Ministerio Público donde duerme un plácido sueño desde 2019.

Todo lo ocurrido en estos días acongoja a la gente común que comprueba con estupor la expansión del narconegocio y sus secuelas de violencia. Sin embargo, lo que más asusta son las contradicciones de un gobierno flojo y desorientado.

Giuzzio ha dicho que el gran mérito de Cartes es su poder de extorsionar a Mario Abdo. Extorsionar significa obtener una cosa de una persona mediante el uso de la violencia o las amenazas. Eso deja en posición incómoda al presidente de la República. ¿Por qué motivo se deja extorsionar? ¿Es posible gobernar bajo extorsión?

Más curiosa aún fue la afirmación del ministro de que Cartes bastardea todas las instituciones usando el sistema financiero en provecho propio. Denunció que todo se sabe y por eso su banco ya no tiene corresponsalías. Aseguró que “el único que le sigue prestando servicios es el Banco Nacional de Fomento, gracias al cual sigue haciendo operaciones al exterior”. Ahora, ¿ese banco no es del Estado? ¿Cómo es posible que el gobierno oxigene a quien lo quiere boicotear?

Son demasiadas contradicciones para digerirlas tan rápido. ¿No encontró el gobierno un momento más adecuado para destituir al comandante de la Policía Nacional? ¿Tenía que ser en plena interpelación al ministro del Interior?

Mario Abdo no emite señales claras y su liderazgo es cada día más insignificante. Del otro lado, Horacio Cartes está recibiendo ataques lacerantes en su flanco más frágil, el de sus negocios. Ambos son enemigos. Ambos son colorados. Ambos se deben la vida. Éste ha salvado a aquél del juicio político. Aquél permite a éste que sus empresas no sean molestadas. Mientras uno y otro dirimen sus cuestiones de amor-odio, la oposición mira con cara de foca displicente.

Como antes, como siempre, la agenda nacional es la interna del Partido Colorado. Giuzzio es solo la anécdota de hoy. Cartes pretendió vengarse y su estrategia produjo un resultado inverso. Lo que debería importarnos es que el narcotráfico disfruta de su época de mayor esplendor.

El Partido Colorado, principal opositor del Partido Colorado. Narcos en todas sus facciones y en todas las instituciones del Estado. Opositores sin perspectiva. Ahí la tiene: esa es la narcopsicosis.

Más contenido de esta sección
Paraguay vive una transformación que ya no tiene retorno en el campo de la educación médica, y el año 2025 marcará un punto de inflexión en ese camino. Desde la creación de la Agencia Nacional de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior (Aneaes) en 2003, la regulación de la calidad universitaria pasó de ser un ideal normativo a convertirse en un mandato asumido con responsabilidad creciente por las carreras de Medicina, tanto públicas como privadas.
La gestión de residuos sólidos urbanos es mucho más que una cuestión ambiental: es un tema de salud, equidad y desarrollo. En Paraguay, tanto en zonas urbanas como rurales, los desafíos son múltiples, pero también lo son las oportunidades para impulsar soluciones sostenibles.
Hoy he conocido a Nolberto, un niño de 11 años que ha llegado a la Clínica. Su papá está en la cárcel por el asesinato de su esposa (mamá del niño). El pequeño fue encontrado envuelto en una sábana, en el suelo. Tiene una seria desnutrición, no camina ni habla debido a su evidente retraso.
Qué belleza es ver que María está viva en tantos de nosotros. El sentimiento de ser sus hijos, de protegerla y de que “nadie se meta con ella” ha sido muy bello durante estos últimos días. Suena extraño, pero es una madre “viva” entre nosotros. Nadie ha quedado indiferente: Ateos, protestantes, cristianos de todo tipo. ¡María es una vida! Y esta vida se llama Iglesia. Quizá es este el título más grande que hoy podemos dar a María, “Madre”, porque es la experiencia de cada uno de nosotros. Sin embargo, es bueno aclarar para no sospechar.