En un acto que marcó el inicio formal de la intervención en la Municipalidad de Ciudad del Este, el interventor Ramón Ramírez reveló ayer que la institución recibe una deuda acumulada de aproximadamente G. 108.000 millones. La información fue dada a conocer tras la firma del corte administrativo, realizada en la intendencia, en presencia del intendente suspendido, Miguel Prieto.
Ramírez presentó documentos oficiales que respaldan la cifra y advirtió sobre la complejidad del desafío financiero que afronta la nueva administración. “Este documento fue aprobado íntegramente, sin modificaciones. Lo firmaron los representantes de la administración saliente”, explicó, evidenciando la situación económica crítica que heredó.
Según los datos, al 23 de junio se había ejecutado solo el 40% del presupuesto municipal, equivalente a unos G. 148.000 millones, mientras que el dinero disponible en caja es escaso, sumando apenas G. 16.800 millones. Esta disparidad subraya la difícil tarea de administrar los recursos para cumplir con los compromisos pendientes.
La deuda más urgente que debe ser atendida durante la intervención asciende a G. 27.000 millones. De esta cifra, 6.000 millones corresponden a salarios pendientes del mes de mayo, que incluyen seguro médico y afectan al 63% del personal que aún no ha recibido su remuneración correspondiente al mes de mayo.
Además, existen G. 7.800 millones en transferencias pendientes al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), derivadas de recaudaciones por impuesto inmobiliario, compromisos que requieren pronta ejecución financiera.