Julio Fernández habló con los medios de prensa en Mburuvicha Róga, luego de reunirse con el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, a quien informó acerca de las cifras de recaudación de Aduanas durante el mes de setiembre de este año.
En el noveno mes del año los ingresos aduaneros alcanzaron la cifra total de G. 1.133 mil millones, equivalentes a unos USD 164 millones. Siendo la mejor recaudación de todos los tiempos, el monto percibido se ubicó en un 35% por encima del ingreso de G. 838.832 millones registrado en setiembre de 2020.
“Se registra importante superávit al cierre de setiembre. Aduanas registra el octavo mes consecutivo de superávit. Es una oxigenación para el fisco, pero estamos saliendo todavía de una pandemia”, subrayó.
Sin embargo, dijo que le preocupa que este tipo de informaciones generen falsas expectativas y se generen pedidos adicionales de aumentos. “No queremos generar con esto la sensación de abundancia”, acotó.
Siguió explicando que los desembolsos que se hicieron durante la crisis sanitaria son mucho más elevados que lo recaudado. Fernández señaló que los rubros que más crecieron son los combustibles, lubricantes, vehículos, bienes de capital, entre otros.
En otras cosas, Fernández informó que en unas semanas más estarán inaugurando la nueva sede central de Aduanas, un edificio moderno de ocho niveles costeado con recursos obtenidos de ahorros que realizaron, aseveró.
Denuncia amenazas
El director de Aduanas dijo que aumentó su seguridad y que recibió amenazas, tras la denuncia que realizó contra el senador colorado Martín Arévalo por supuesto tráfico de influencias y aseveró que en ningún momento accedió a los pedidos del legislador.
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“Estoy con más cuidado, la seguridad está reforzada. Sí, estoy teniendo más cuidado. Me llegaron mensajes y eso nos alertó", manifestó. También recibió amenazas la administradora de Aduanas de Paksa, Guadalupe Ruiz.
“Fueron interlocutores que iban a eliminarnos a mí y a Guadalupe Ruiz”, agregó e indicó que “seguramente” presentará la denuncia. En otro momento, fue consultado sobre la posibilidad de renunciar y respondió que hay mucho trabajo que dejaría inconcluso si toma esa decisión.
“Mi familia me pide la renuncia, pero queremos dejar un legado y una infraestructura como corresponde en Aduanas. Hay demasiado trabajo que va a quedar inconcluso si tomamos esa decisión (renunciar)”, explicó.
Según la denuncia de Fernández, Arévalo habría intermediado por el comerciante árabe Ahmad Khalil Chams por un contenedor de productos electrónicos valuado en USD 3 millones.