El senador del Partido Democrático Progresista (PDP) Rafael Filizzola advirtió que si el negocio del narcotráfico y la corrupción continúa creciendo podría derivar en un Estado fallido, debido a que el crimen organizado está vinculado con la política. “Estos niveles de voracidad no vi nunca”, manifestó.
El legislador recordó la muerte del diputado Lalo Gomes “en extrañas circunstancias”, que no fue aclarado aún.
Indicó que el gobierno no puede hablar de crimen organizado cuando tiene a sus ministros involucrados. Nombró al ministro de Inteligencia Marco Alcaraz, que tras la filtración de los chats de Lalo, se pudo conocer que recibía instrucciones e incluso regalos, como carne para asado, del diputado, que estaba investigado por sospechas de narcotráfico.
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También nombró al fiscal Lorenzo y lo acusó de “enterrar” el Operativo Smart y de darle tiempo a Sebastián Marset de escapar.
El tercero que mencionó es al ministro de la Senad Jalil Rachid, que tiene en su equipo de inteligencia a personas vinculadas con Lalo Gomes, incluso miembros de su familia.
“Cómo vamos a luchar contra el crimen organizado si los empleados del crimen organizado están al frente de estas instituciones. Imposible. Vamos a ser un narco Estado si no se resuelve esta situación”, lamentó.
Filizzola se sumó al senador liberal Éver Villalba, que expuso sobre el avance del negocio de la cocaína en Paraguay tras una investigación académica, que señalaba los costos del tráfico, que son muy elevados, por lo que es imposible que una persona sin poder económico pueda encargarse.
Reveló que el costo para traer una avioneta de Bolivia con una carga de 350 kilos de cocaína es de USD 250.000,. Esta cifra incluye el vuelo, el flete y las coimas. La droga en Bolivia cuesta USD 400 y en Paraguay, USD 3.500 el kilo, precisó.
