La fiscala Carolina Quevedo apeló ayer la decisión del Tribunal de Sentencia de enviarlo a casa al hombre, contra quien presentaron las pruebas de que manoseó en sus partes íntimas a su propia hija, el 20 de febrero de 2022, en el interior de la vivienda del padre, en el Departamento de Concepción.
Lo que parecía ser un domingo de visita al padre, terminó con el atroz crimen al ser abusada por su propio papá.
Los jueces comprobaron que el hecho ocurrió y dictaron la alta condena en contra del hombre, quien ya tenía libertad ambulatoria dictada por el juez de Garantías. El Tribunal revocó esa medida y en vez de prisión, sorpresivamente, le dictaron el arresto en casa.
“No tiene razón de ser”, confirmó la fiscala Carolina Quevedo. “¿Cómo con una pena de 10 años va a tener arresto domiciliario? Eso le computa como pena privativa mientras quede firme la sentencia y no sabemos cuándo sería”, explicó la representante del Ministerio Público.
¿Fingió alteración mental?
El Tribunal se basó en que el hombre tiene trastorno mixto de ansiedad, y que no puede valerse por mí mismo. “Es una bofetada”, cuestionó la agente.
El hombre durante todo el juicio se iba de la mano con su mamá, se golpeaba la cabeza contra la pared, y alegaba alteración mental, pero afuera llevaba una vida normal.
Familiares de la niña confirmaron también que el hoy condenado se paseaba por la ciudad normalmente.
Durante el juicio oral, la defensa intentó hacer pasar al acusado de tener desequilibrio mental, a fin de declararlo irreprochable, pero fue descartado con las pericias técnicas.
En un primer juicio, ya se había hecho una pericia psicológica, que determinó que el hombre finge los hechos, que no tiene ninguna alteración. Incluso, hay quienes le vieron llegar al juicio y dar su número de cédula en el ingreso al Palacio de Justicia, pero ante el Tribunal no podía y decía otra edad y negaba tener hijos, según contaron las fuentes.
En este segundo juicio, se contó con la declaración del médico tratante, que confirmó el trastorno mixto, pero confirmó que no es una persona irreprochable, es decir, que podía ser juzgado y que es plenamente capaz de conocer y obrar en consecuencia.
La Fiscalía incluso recabó datos de que el hombre seguía el curso de Habilitación Pedagógica y, en su planilla de calificación, tiene excelentes calificaciones.
Más irregularidades
El hombre en el 2022 se mantuvo prófugo desde febrero hasta agosto de ese año y tras ser detenido, el juez Penal de Garantías lo benefició ya con el arresto en casa. Esto no fue apelado por el fiscal quien llevaba en ese momento el caso, ni tampoco se apeló cuando se le dio la libertad ambulatoria.
La fiscala Carolina Quevedo, quien tomó la causa recién cuando se elevó a juicio, pide ahora la prisión preventiva.