El director de Memoria Histórica del Ministerio de Justicia, Rogelio Goiburú, reconocido activista por la búsqueda de los detenidos desaparecidos del stronismo, subrayó que dicha plaza no fue nombrada por cualquier persona extraviada sino específicamente a los que fueron víctimas en el periodo dictatorial que duré del año 1954 hasta 1989.
Recordó que hace poco tiempo la plaza le fue negada a las organizaciones sociales por los derechos humanos que querían realizar un acto allí, ya que había sido “reservada” por organizaciones sionistas.
Este instó a hacer un mayor uso y darle sentido a este espacio de memoria que fue nombrado en 1993 por la Junta Municipal a pedido de los colectivos de defensoras y familiares de las víctimas del terrorismo de Estado.
Diversos actores sociales también hicieron uso de palabra pidiendo al Gobierno respeto a dicho espacio, a las organizaciones y a la memoria histórica del país.
Recordaron los diversos intentos desde distintos gobiernos de marginar este espacio y aplacar la lucha por la memoria y la justicia social, que tuvieron como barricada a la sociedad civil organizada, que busca consolidar este espacio para las futuras luchas.