06 sept. 2025

Mercosur se prepara para otra cumbre con la mirada puesta en el comercio global y la UE

En medio de un escenario de incertidumbre global y de nuevas medidas arancelarias, el Mercosur desarrollará esta semana su cumbre semestral de jefes de Estado, con una agenda centrada en el comercio y nuevamente hacia el acuerdo con la UE.

Mercosur.jpg

Fotografía durante una anterior cumbre de jefes de Estado del Mercosur.

Foto: EFE.

El incierto escenario global, determinado por la guerra comercial y los efectos económicos del conflicto en Oriente Medio, empujó al Mercado Común del Sur (Mercosur) –integrado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y ahora también Bolivia– a dinamizar su agenda comercial, con mayor margen de maniobra en materia arancelaria y con el objetivo de lograr la ratificación del acuerdo con la Unión Europea (UE).

En ese marco, el bloque regional se prepara para celebrar este miércoles 2 y jueves 3 de julio, en Buenos Aires, Argentina, su cumbre semestral de jefes de Estado, con una agenda enfocada en el comercio, según recoge la Agencia EFE.

Uno de los ejes centrales vuelve a ser el Tratado del Libre Comercio con la Unión Europea (UE), luego de que ambas partes llegaran a un acuerdo político a finales de 2024, tras más de 25 años de negociaciones, y de que, en la primera mitad del año, el Mercosur ya haya reafirmado la urgencia de dinamizar su agenda de acuerdos externos.

Nota relacionada: Acuerdo Mercosur-UE podría firmarse a finales del 2025

Se espera entonces la presentación del texto jurídico definitivo y su traducción para iniciar los trámites de ratificación parlamentaria, aunque entre los 27 socios europeos aún persisten las resistencias para validar el pacto.

Lisandro Mogliati, consultor en negocios internacionales, explicó a EFE que será difícil conseguir la ratificación cuando en la UE prima la “lógica proteccionista, sobre todo en el sector agroindustrial”, en el que los sudamericanos son más competitivos.

Florencia Rubiolo, investigadora y también experta en relaciones internacionales, coincidió con Mogliati, pero destacó que, desde el punto de vista político, sería importante para la UE lograr que el pacto con Mercosur sea “exitoso” como “una forma de reafirmar que el multilateralismo regional aún es eficiente en momentos en que el plurilateralismo, uno de los grandes pilares de la UE, está siendo puesto en duda en Occidente”.

Otros acuerdos externos

La agenda del bloque sudamericano también contempla cerrar cuanto antes acuerdos con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA, por sus siglas en inglés), formada por Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza, y con Emiratos Árabes Unidos, dos mercados que tienen potencial e importancia para captar inversiones.

Por otra parte, el Mercosur debe dar su aprobación a una resolución en el marco de un entendimiento clave sobre su arancel externo común (AEC), que se logró en pocos meses y que da a sus socios flexibilidad para afrontar el comportamiento del comercio global, sobre todo ante las sucesivas idas y venidas del presidente de EEUU, Donald Trump, con los aranceles y la escalada del conflicto bélico en Oriente Medio.

El acuerdo les permite a los países sumar cincuenta productos a sus listas “temporarias” para “la adaptación al nuevo contexto internacional” y hacer excepciones al AEC que aplica la unión aduanera a las importaciones, otorgando a los Estados miembros mayor margen para, por ejemplo, negociar acuerdos de reciprocidad arancelaria con EEUU en un conjunto limitado de bienes.

“Esto da más flexibilidad porque permite a los países tener una política comercial más bilateral. Este tipo de medidas se alinea con un movimiento en el comercio internacional, donde grandes potencias, sobre todo EEUU, están forzando a que otros países adopten medidas de reciprocidad”, explicó Rubiolo.

Lea también: El análisis de Peña en Cumbre del Mercosur: “El pueblo anhela líderes con metas y propósitos”

La investigadora añadió que esto también “abre la puerta a la negociación con otros países, no solo con EEUU, porque, aunque la motivación sea la política arancelaria estadounidense, el resultado va a impactar en el vínculo de los miembros del Mercosur con otros países, por ejemplo, China”.

El comercio del Mercosur se rige por un AEC con partes alícuotas que van desde el 0 al 35%, pero cada miembro cuenta con una Lista Nacional de Excepciones (LNE) al AEC en una cantidad limitada de productos en los que puede subir o bajar los aranceles, detalló EFE.

Según Mogliati, mientras la ampliación de las LNE permitiría a Argentina “abrir su economía” al establecer aranceles por debajo del AEC, para los demás socios, como Paraguay, podrían ser un “salvoconducto para protegerse de un potencial aluvión de productos” a partir de la guerra comercial global.

Más contenido de esta sección
El Congreso Nacional finalmente instaló la Comisión Bicameral que estudiará el proyecto de PGN 2026. Beto Ovelar fue electo como presidente, mientras que más de 50 parlamentarios conforman como titulares.
Por cada segundo se realizan 13,3 transacciones con tarjetas en el país, esto representa cinco veces más que lo que se realizaba en el 2021. Los datos reflejan el cambio en la forma de pago de los clientes.