Datos alarmantes fueron revelados ayer durante el conversatorio sobre trata de personas en el país, realizado en el Centro Cultural de España Juan de Salazar: que el 76% de las víctimas son mujeres y el 50% son menores de 18 años, teniendo como fondo la pobreza, la falta de oportunidades laborales y de estudios académicos concluidos.
El evento “Avances y retos sobre la trata de personas en Paraguay. 20 años de aportes de la Cooperación Española” marcó el cierre de un ciclo de dos décadas de apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) al abordaje integral de la trata de personas en el país, señala una nota de prensa.
Se presentaron los resultados más recientes del estudio de caracterización del fenómeno de la trata en Paraguay, elaborado por el Ministerio Público, con el apoyo del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA).
El perfil abunda en detalles: la mayoría no había concluido la educación secundaria; más del 50% tenía empleos informales y percibía ingresos por debajo del salario mínimo.
“Es fundamental que se vea y se hable de esta problemática, para lograr la articulación que requiere el programa nacional. Este será un ejercicio institucional que demanda un trabajo coordinado entre varias instituciones”, resaltó en el evento Teresa Martínez, coordinadora del Programa Nacional de Prevención, Combate y Atención a Víctimas de la Trata de Personas. “Los datos muestran que sigue existiendo una fuente constante de captación de mujeres y niños; por eso es tan urgente la implementación efectiva del programa, que permitirá que las acciones tengan un impacto real en los territorios más afectados”. refirió Martínez.
El evento se inició con las palabras de Rocío Galiano Marés, Representante Nacional del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), y de Javier Parrondo Babarro, Embajador del Reino de España. Posteriormente, se desarrolló una exposición sobre los hitos, logros y desafíos de 20 años de cooperación española, a cargo de la consultora Laura Bareiro.
“Puede ser trata”
Promesas como “un amor online”, “un trabajo que te cambiará la vida” o “ganancias altas sin esfuerzo” pueden ser fachadas para ocultar redes de explotación sexual o trabajo forzoso. Sobre esto alerta la campaña #PuedeSerTrata; es decir, sobre las nuevas estrategias de captación de víctimas mediante redes sociales y tecnologías digitales, y busca principalmente alertar a adolescentes y jóvenes sobre estos riesgos.