@lizanaliapy
La ex senadora Kattya González, quien espera una resolución de su acción ante la Corte, luego de ser destituida de su banca por el cartismo, cuestiona el encuentro entre ministros de la Corte con Santiago Peña. Pudieron haber tratado varias causas, dice; además, la Justicia se sigue manejando como en la época de la dictadura, “donde se alzaba un teléfono y (el poder) daba órdenes”.
–¿Qué percepción tiene de la reunión secreta de ministros de Corte con Peña?
–Dentro de una democracia, siempre se permite el tema del equilibrio y del recíproco control de la reunión entre poderes del Estado desde un marco teórico. No debería ser mal visto, pero esa reunión exige un contexto.
Y ese contexto siempre se da en el marco de una agenda pública y publicada, de manera a que las partes tengan acceso a cuáles van a ser los temas a tratar y el resultado de una eventual comunicación entre poderes del Estado.
Ahora, dicho esto y enmarcado, lo que tuvimos fue una noticia a partir de la publicación de un medio. Si no se hubiese filtrado la existencia de esta reunión, tampoco nadie hubiese dicho nada.
Y hoy, días después que se salga a aclarar, se deja en primer lugar, uno, la confirmación de que la reunión existió y no sabemos al no haber sido pública esta reunión, si solamente estuvo el presidente de la República o si realmente estuvieron otros actores periféricos al sistema, como el presidente de la ANR Horacio Cartes, y el asesor político y vicepresidente tercero de la ANR, José Alberto Alderete, que también es señalado como uno de los presentes en esa reunión.
Ahí cambia la tonalidad. Y en segundo lugar, según los ministros de Corte, esta no fue una reunión interpoderes, debido a que existieron ministros de Corte que públicamente dijeron que ellos no fueron convocados.
Entonces, ahí se rompe la estrategia que hoy pretende la Corte señalar, de que esta es una reunión normal, de que esto se da en el marco presupuestario para poder cerrar el año 2025 y no tener déficit de créditos que se dejan para pagar el año que viene.
–¿Se trataron causas judiciales?
–Hoy no podemos confiar. ¿Dónde estaba el ministro de Hacienda, el ministro de Economía, el secretario de la DNIT, o los que hacen las planificaciones de los pagos?
Hoy nosotros tenemos, como ciudadanos, el legítimo derecho a desconfiar de que en esa reunión se trataron otras cuestiones.
¿Por qué suponemos eso? En primer lugar, porque hubo ya dos proyectos de ley que en un breve tiempo modificaron la Ley 609 del funcionamiento orgánico de la Corte Suprema de Justicia.
Una de ellas realmente representa, en términos de transparencia, un retroceso absoluto, porque vuelve al voto secreto. Nosotros tenemos acá circunscripciones judiciales que están en entredicho, debido a la mafia de los pagarés.
Entonces, ¿porqué no suponer que uno de los temas que se trató en esa reunión secreta fue justamente garantizar el apoyo que al otro día se da en la Cámara de Diputados y habilitarles a los ministros con el tema?
Y segundo, acá hay causas emblemáticas que hace rato luego dejaron de ser consideradas por la Corte como de prioridad.
–¿Qué casos son?
–Hay una acción de amparo constitucional de acceso a la información pública promovida en el 2022 por el entonces diputado Édgar Acosta y quien te habla en mi carácter de diputada. Promovimos debido a la negativa de la Itaipú Binacional, violando claramente el artículo de la Ley de Acceso a la Información Pública, que dice que las binacionales son sujetos obligados.
Hace tres años la Corte es cómplice de la oscuridad de la Itaipú.
Lo segundo, el caso de conflicto de poderes que se da con el nombramiento del representante del Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura. Hablamos del caso Pucheta-Kronawetter, donde necesitamos saber si realmente es válido o no el cambio cuando el cambio de Gobierno o realmente la persona que es designada por el Ejecutivo tiene un tiempo de mandato como lo indica la ley.
Y por supuesto que está mi caso, en donde ellos cada vez tienen menos excusas y han cometido todo tipo de atropellos en estos dos años. Son mil cosas que pudieron estar realmente en la mesa de negociación en una reunión oscura, secreta y no publicada.
–Sobre tu causa, ¿se tendría que volver a integrar la Sala tras esta reunión?
–Nosotros hoy estamos evaluando con el equipo jurídico cuál es el impacto ante esta acción que, si se quiere, es un crimen contra la democracia y la República.
Estamos evaluando la presentación que eventualmente hagamos, teniendo en cuenta que hoy la causa está, lo mío tendría efectos concretos… Hoy a mí ya no me provoca ninguna confianza.
La falta de equilibrio que hoy existe en la Corte es algo escandaloso. Sí, tienen tiempo para declararse inamovibles en causa propia, pero no tienen ni independencia ni coraje a la hora de impartir justicia en casos que son graves.
–¿La reunión podría afectar a otras causas donde el cartismo tiene interés?
–Yo, el 14 de febrero, cuando me despido en mi curul, yo digo que vienen por todos y tienen un plan. La persecución a la oposición no es circunstancial, no es casual y no es aleatoria. Esto forma parte de un esquema igual que el resto de los esquemas que estamos viendo.
Entonces, acá el hecho es querer matar cívicamente y políticamente a sus adversarios, adversarios que ellos saben que están bien posicionados. Entre esos se encuentra sin lugar a dudas el ex intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto.
–¿Qué espera de la Justicia tras esta evaluación?
–Hoy no podemos nosotros esperar que la Justicia dé a cada uno lo suyo, que repare la injusticia, que repare el error, que resuelva un conflicto, sea entre particulares, sea entre poderes, y eso requiere determinadas cualidades de las cuales tienen que estar adornados los ministros de Corte, los jueces, los fiscales, los defensores, los secretarios, todo el sistema judicial en sí.
Hoy vemos que existen apenas cambios cosméticos para que no cambie nada. Seguimos teniendo una Justicia que si tenés dinero para pagarle al gestor o al padrino, funciona; y si no tenés, sencillamente te jodés y te vas a tu casa a llorar tus miles de miserias.
Yo no vi desde la Corte ningún interés en romper ese círculo del eterno retorno que hace 35 años de transición democrática le hace tanto daño a este país.
Se podría decir que a la Justicia nunca le llegó la democracia. Se siguen manejando como señores feudales, se sigue manejando como en la época de la dictadura, donde se alzaba un teléfono y se le daba órdenes y criterios.
Se podría decir que a la Justicia nunca le llegó la democracia. Se siguen manejando como en la época de la dictadura, donde se alzaba un teléfono y se le daba órdenes y criterios.
La falta de equilibrio en la Corte es algo escandaloso. Tienen tiempo para declararse inamovibles, pero no el coraje a la hora de impartir justicia en casos que son graves.
Kattya González
Es abogada, doctora y magíster en Asuntos Públicos y Gobernabilidad.
Fue concejala municipal de Villa Elisa (2006-2010).
Estuvo como diputada (2018-2023) y luego senadora de la nación (2023-2024).
Es autora de siete libros y docente en la Universidad de Ciencias Jurídicas Nuestra Señora de Asunción.