La situación en el Hospital General de Santa Rosa del Aguaray sigue siendo crítica y vuelve a generar preocupación entre pacientes, familiares y personal de salud, ante la falta de una solución estructural que evite nuevamente este tipo de emergencias.
Tras las intensas lluvias registradas en la zona, gran parte del centro asistencial quedó bajo agua, obligando a activar un plan de contingencia.
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Del total de 55 pacientes internados, 25 fueron trasladados a distintos hospitales del departamento de San Pedro, mientras que dos pacientes neonatales fueron evacuados de urgencia en helicópteros hasta la capital del país, debido a la complejidad de sus cuadros clínicos.
La sala de Pediatría afectada fue construida durante la pandemia de Covid-19 como espacio de contingencia y posteriormente fue destinada a la atención de niños.
📌#AHORA Parte de Pediatría del hospital de Santa Rosa del Aguaray sigue bajo agua.
— Telefuturo (@Telefuturo) December 13, 2025
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Sin embargo, su ubicación y condiciones la convierten en una de las áreas más vulnerables del hospital, situación que, según advierten profesionales y autoridades locales, se repetirá ante cada lluvia de gran magnitud si no se encara una intervención de fondo por parte del Ministerio de Salud Pública.
Durante la emergencia se vivieron madres evacuando la sala con sus hijos en brazos, buscando zonas más altas para escapar del avance del agua. La inundación también alcanzó sectores estratégicos como el tablero eléctrico, el generador y el área donde se encuentran los tanques de oxígeno, lo que generó un riesgo mayor.
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Funcionarios de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) intervinieron de manera urgente y procedieron al corte preventivo del suministro eléctrico por aproximadamente una hora, con el fin de evitar un accidente y permitir las tareas de desagote. Posteriormente, el servicio fue restablecido.
Mientras tanto, la comunidad sanitaria y la ciudadanía reclaman una solución definitiva que garantice condiciones seguras y dignas de atención, evitando que cada temporal vuelva a poner en riesgo la vida de pacientes, especialmente de niños y recién nacidos.