Víctor Ríos, ministro de la Corte Suprema de Justicia, explicó en entrevista con NPY en qué consiste la nueva tecnología que la máxima instancia judicial pretende implementar y que está en pleno estudio.
A través de un convenio con la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) buscan poner en marcha un software para el control de admisibilidad de acciones.
Dicho trámite tiene aspectos estandarizados que pueden ser programados con inteligencia artificial.
“En promedio ingresan 4.000 expedientes al año a la Sala Constitucional y en otras salas aproximadamente 1.000. En tres años son 12.000 expedientes. Entonces, eso lleva mucho tiempo para el famoso control de admisibilidad”, señaló Ríos al canal.
“En este momento estamos haciendo una auditoría de la sala y tenemos aproximadamente 15.000 expedientes”, prosiguió.
Dijo que la idea es aceptar los expedientes en forma automática si cuentan con todos los requisitos, tales como fijación de domicilio, artículo de la Constitución Nacional o principio violados, fundamentación clara, entre otros.
Si el expediente ingresado no reúne las condiciones, el software lo rechazará.
Mencionó que hay varias acciones con mucha antigüedad que “duermen el sueño de los justos” en esta etapa porque no son impulsadas por las partes.
“Como no tenemos código procesal constitucional en Paraguay —que es otro proyecto que estamos impulsando— se rige por el Código Procesal Civil. ¿Qué significa eso? Que el abogado tiene que estar impulsando permanentemente el caso. Como está a instancia de parte, el expediente queda ahí por años”, explicó.