Como todos los años, la Contraloría entregó al Congreso los resultados de auditorías financieras, auditorías de cumplimiento, también auditorías de desempeño, verificación de obras y evaluación de planes de mejoramiento.
Como uno de los puntos más resaltantes, el contralor Camilo Benítez observó las irregularidades que se presentan en el Instituto Nacional del Cáncer (Incan) con la falta de planificación en la compra de medicamentos.
Comentó que se realizó una licitación para comprar un medicamento que precisaba un enfermo oncológico, pero al momento de la compra ya la persona había fallecido y el monto que se invirtió fue más de G. 5.000 millones, además, “el Incan no pudo encontrar otra persona a quien destinar este medicamento, por lo que venció".
“También vemos una metodología con las medidas judiciales a través de amparos. No hay una planificación de compra de medicamentos. Muchas veces se compran medicamentos que están a punto de vencer”, comentó.
“En Paraguay es extremadamente desesperante la situación de las personas que sufren por estas enfermedades, especialmente de cáncer, y no vemos una buena planificación”, lamentó.
Sostuvo que “al momento de comprar un medicamento y ese medicamento vence, es un perjuicio para el Estado paraguayo directamente”.
Precisó que si no se le pudo dar otro destino al medicamento, a otro paciente, “siendo que hay miles y miles de personas que de alguna manera sufrimos o padecimos por este tipo de enfermedades, es muy irresponsable en cuanto a los administradores no prever o no planificar”.
Lamentó que los pacientes deban recurrir a amparos judiciales para conseguir que se compren sus medicamentos.
Evaluaciones
El contralor mencionó que se cuenta con la evaluación del control interno en todas las instituciones públicas, también tenemos un informe sobre riesgo tecnológico, donde se ve la debilidad institucional en cuanto al riesgo que tiene el Estado en sí.
Asimismo mencionó que existen dictámenes con salvedad, donde están el Ministerio del Interior, el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio de Desarrollo, el Ministerio de Agricultura, Puertos, Dinapi, Conatel y el Crédito Agrícola de Habilitación. “Los estados contables demuestran una suerte de razonabilidad en su estado financiero con la salvedad de algunas observaciones que deban mejorar”, precisó el contralor.
“También tenemos dictámenes no razonables en el caso del INE y Mades y un dictamen con abstención en Essap”.
Detalló que en el caso de Essap, la abstención se debe a que la empresa no tiene aprobada su balance por la asamblea; entonces, el equipo auditor no pudo hacer una recomendación o un dictamen porque la propia empresa no tiene aprobado su balance.