Esa comunidad así como varios asentamientos de la zona padecen una nueva y aguda temporada de sequía. Hace al menos tres meses que no llueve en esa parte del Chaco.
Debido a esta situación, incluso, la señalada población nativa decidió cerrar la escuela que hay en la zona, ya que los niños no cuentan con agua para beber ni siquiera para el aseo personal.
Por el momento el acarreo de agua cruda y salada se realiza desde un tajamar de una estancia vecina del lugar a través de un camión cisterna a cargo de la SEN. Los pobladores indicaron que esto solo paliará la escasez del vital líquido en esa comunidad, pero existen otras en la zona que también padecen la misma carencia.
Lanzaron un pedido de auxilio a las autoridades nacionales para que puedan asistirles con agua potable y también la reparación del aljibe. Esto es para que se pueda contener el agua almacenada para la comunidad y para los alumnos de la escuela. AM