Loreto vivió ayer una jornada festiva por su 233° aniversario de creación y la celebración de su patrona, Nuestra Señora de Loreto. Tras la tradicional procesión y la misa central, las actividades continuaron, ya que se declaró asueto distrital.
Sin embargo, en medio del ambiente festivo, uno de los mensajes más contundentes fue el reclamo por urgentes inversiones en infraestructura vial para el distrito.
El intendente Rodolfo Insaurralde aprovechó la ocasión para insistir en el asfaltado de la ruta Loreto–Paso Barreto, un proyecto ya confeccionado, pero sin recursos asignados por parte del Gobierno. Señaló que esta obra es clave para el desarrollo económico y social de la zona, ya que actualmente el tramo se vuelve intransitable en días de lluvia.
También expresó preocupación por el grave deterioro de la ruta PY22, que requiere un bacheo inmediato mientras se aguarda la licitación para su reconstrucción. Según el jefe comunal, el estado actual de esta vía afecta la movilidad diaria de los pobladores y el traslado de productos.
Insaurralde destacó que otro desafío permanente es la reparación de los caminos vecinales, todos de tierra, que se vuelven inservibles con cada temporal, aislando a varias comunidades rurales.
Por su parte, el párroco Nelson Ayala valoró la coordinación con la Municipalidad en la organización de los festejos, pero también acompañó el llamado a priorizar las obras que permitan mejorar la calidad de vida de los habitantes de Loreto.
Loreto tuvo su origen en la colonización agrícola sin que mediase fundación oficial específica, pero la Ordenanza Municipal N° 12 del año 2003 registró el 10 de diciembre de 1792 como fecha fundacional en base a documentos obrantes en el Archivo Nacional de Asunción. JR