EFE
“El Gobierno brasileño lamenta el episodio de violencia que resultó en la muerte de un joven político y manifiesta su confianza en las medidas ya tomadas por el presidente Horacio Cartes para el esclarecimiento de las responsabilidades del caso”, dice una nota de un único párrafo difundida por la Cancillería.
Los sucesos ocurridos el pasado viernes también fueron comentados por el ministro de Relaciones Exteriores brasileño, Aloysio Nunes, en una entrevista este lunes con la radio Jovem Pam, en la que consideró que “fueron hechos graves, pues depredaron el Congreso” paraguayo.
Los incidentes comenzaron luego de que 25 senadores votaron a favor de permitir la controvertida reelección presidencial, un proyecto elaborado conjuntamente por el Partido Colorado, de Cartes, y por el Frente Guasu, del expresidente Fernando Lugo.
En las revueltas falleció Rodrigo Quintana, de 25 años y miembro de la juventud del Partido Liberal, y parte de las dependencias del Parlamento fueron incendiadas por manifestantes.
Según Nunes, esos hechos revelan que existe en Paraguay “una tensión política”, aunque sostuvo que Cartes “ha hecho llamamientos a una pacificación” y apuntó que ese país “tiene un Poder Judicial al que todas las personas pueden recurrir”.