Baños inoperativos, cocina desmantelada, camas limitadas, mosquitos y falta de ventilación son algunas de las condiciones en las que deben pasar sus días las madres de niños internados en la unidad de neonatología del Hospital Nacional de Itauguá.
“El baño es inservible, no se puede sentar una mamá con una herida. Le puede agarrar otra vez una infección. Tenía gusanos, no se podía entrar en ese lugar”, dijo a radio Monumental 1080 Amalia Talavera, quien días atrás dio a luz a su bebé que precisa quedarse una semana más en la incubadora.
Nota vinculada: Familiares de pacientes sufren el intenso frío en el deplorable albergue del IPS Central
🔴 Deplorable estado del albergue del Hospital Nacional de Itauguá
— Monumental AM 1080 (@AM_1080) March 7, 2025
👉🏼 La periodista Mariela Fretes realizó un recorrido en el albergue para conocer cómo las madres de recién nacidos pasan los días tras pasar por cirugías.
👉🏼 Denuncian baños inoperativos, cocina desmantelada,… pic.twitter.com/7eHW4qhCVe
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La mujer agregó que por la falta de ventiladores en el sitio se ven obligados a salir a los pasillos y duermen en pésimas condiciones, tirando colchones en el piso.
Además de las precarias condiciones, los familiares de los pequeños pacientes también se quejaron del trato que brindan los médicos y las enfermeras. “Es indignante, no se puede hacer nada. Dicen que son profesionales, pero el trato que dan da mucho que desear”, se quejó Ignacia Martínez, que está acompañando a su hija que tuvo una operación de cesárea para dar a luz a niñas gemelas.
Por su parte, Arturo Sosa, padre de uno de los niños internados, denunció la escasez de medicamentos e insumos médicos que obliga a los familiares a tener que comprar de farmacias privadas. “Es frustrante que nos priven de algo que supuestamente es gratuito. No tenés antibiótico o antinflamatorio, todo debemos comprar”, expresó indignado.
“Estábamos peor”
“Cuando nos hicimos cargo de la institución, el albergue estaba en peores condiciones”, justificó el doctor Miguel Ferreira, director del centro asistencial.
Afirmó que mejoraron las condiciones del piso y realizaron las gestiones para hacer funcionar sanitarios portátiles, que llegarían el sábado.
Ferreira admitió que tuvo que recurrir a la fundación “Jesús Responde” para realizar las refacciones ante la falta de respuesta de las autoridades del Ministerio de Salud.