Con la venta de asaditos y arepas sobre la avenida principal de Coronel Oviedo, Caaguazú, Sergio Rodríguez pudo juntar recursos económicos para que su esposa e hijos de 7 y 20 años puedan llegar a Paraguay para buscar en familia mejores horizontes ante la difícil situación que se vive en Venezuela.
Rodríguez llegó a ser concejal en su país, en el municipio de Cumboto, estado de Aragua, donde tuvo que dejar su familia para buscar mejores oportunidades. Llegó a tierra guaraní gracias a un amigo que se había casado con una paraguaya y que actualmente se encuentra viviendo en Encarnación.
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Hace unos días el hombre volvió a sentir el calor de hogar con el objetivo cumplido de reunir a toda su familia en la capital de Caaguazú.
Heidi Castellanos, esposa de Sergio, ya se sumó al equipo de trabajo del marido preparando asaditos y arepas.
La siguiente meta del venezolano apunta a la equiparación de sus títulos universitarios en nuestro país para lograr mejores condiciones de trabajo que les permitan vivir y desarrollarse dignamente.
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El hombre asegura tener títulos universitarios de abogado, Licenciatura en Administración y Tecnicatura Agropecuaria.