Ocho años después de aquella gesta estudiantil que logró la renuncia e investigación del entonces rector, Froilán Peralta, finalmente se dio su condena e ingresó al penal de Tacumbú, para cumplir una pena de tres años de prisión por lesión de confianza. Unos 10 decanos de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) también habían sido salpicados por las denuncias y terminaron renunciando a sus cargos.
“La UNA es de los estudiantes y al que no le gusta, que aguante” era el cántico que sonaba con más fuerza por esos días de lucha estudiantil.
Las informaciones sobre la contratación de parientes y otras personas con rubros de docentes, sin que estos cuenten con un título habilitante para ejercer la docencia, causó una gran indignación de los estudiantes y docentes, y se convirtió en el motor de aquella primavera estudiantil del 21 de setiembre de 2015. Sobre lo que fueron esos días de la toma de facultades y las protestas en el campus, habló Arturo Cano, uno de los dirigentes universitarios en ese momento.
—¿Qué recordás del #UNANoTeCalles y de esos días de lucha y de toma del campus y otras facultades?
—Los recuerdos me llevan a los días de organización del movimiento estudiantil que tomó la posta para que esos días históricos hayan sucedido. Recuerdo las caras de mis compañeras y compañeros del Frente Estudiantil por la Educación y todas las luchas que libramos contra aquella estructura política tirana y corrupta.
De repente, pienso en la Marcha Nacional de Colegios Públicos y Privados, en las denuncias periodísticas de la corrupción en la UNA, las denuncias estudiantiles contra los sumarios, persecuciones y expulsiones. Todo ese torbellino de movilizaciones logró sacudir la superficie y fuimos miles expresando nuestro hartazgo con el sistema educativo, cansados de ser perseguidos y silenciados.
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Me acuerdo de la UNA, repleta de estudiantes implacables, con el pueblo paraguayo abrazando la resistencia estudiantil; me acuerdo de las cocinas comunitarias, del agua y el hielo que nos acercaban para que resistamos al calor, tan intenso que hasta nos mojaron con camiones hidrantes de los bomberos voluntarios.
El movimiento #UNANoTeCalles tuvo días multitudinarios de vigilias y movilizaciones. El entonces rector Froilán Peralta un día renunció y tras él una seguidilla de decanos, plasmando en la historia nacional la victoria de los estudiantes, que en sí representa una victoria del pueblo.
—La fuerza de aquella gesta estudiantil es recordada por todos a 8 años. ¿Qué significó para los estudiantes enfrentarse a aquella rosca mafiosa y esa osadía de no callarse más?
—La gesta estudiantil fue un acto de coraje, sabiendo que todo podía salir mal, que la impunidad de siempre podía ocurrir, que nos podían reprimir brutalmente, que nos iban a perseguir. Pero todos los escenarios estaban dados para que de una vez por todas vayamos por los cambios profundos.
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Fueron determinantes los movimientos independientes y democráticos en diferentes facultades, escuelas e institutos que a lo largo de años anteriores fueron generando conciencia para el ejercicio del poder estudiantil, que se expresó en la lucha desarrollada en el campus universitario y las diferentes sedes del territorio nacional.
—¿Con la prisión de Froilán Peralta y la comepapeles se cierra una etapa de la lucha estudiantil?
—En términos del proceso histórico iniciado por el movimiento #UNANoTeCalles, pienso que sí. Sin embargo, la lucha estudiantil está determinada por otros momentos también. Es importante decir que la reforma universitaria pensada por los estudiantes se diluyó con el paso de los años y dio como resultado algunos cambios de forma, y que en algunas facultades se vivieron retrocesos, en otras pudieron avanzar sobre derechos mínimos, marcando el cierre de la lucha estudiantil por la reforma.
—¿Qué cambios creés que faltaron y faltan aún en la UNA?
—Actualmente, soy egresado y veo con cierta distancia la Universidad Nacional de Asunción. En mi tiempo, hubo un sentido de cambio luego de la gesta estudiantil, no podemos decir que vivimos como en los tiempos de Froilán, pero aún falta mucho para que exista plena democracia en las unidades académicas, me parece grave que se hayan eliminado los cursillos de ingreso, que los jóvenes con sueños y esperanzas deban rebuscarse para pagar un cursillo privado, que sigamos teniendo problemas presupuestarios todos los años, como siempre, me parece preocupante que el Estado siga postergando la inversión en educación pública.
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La UNA debería ser el laboratorio para producir ciencia en pos de la vida digna del pueblo, para el salto tecnológico hacia el desarrollo nacional, para pensar hoy el futuro que queremos. Admiro profundamente a estas personas brillantes, que hacen ciencia pensando en el buen vivir de la gente, a pesar de todos los obstáculos.
—¿Creés que aquella hazaña del #UNANoTeCalles seguirá inspirando a los jóvenes de este país para seguir peleando contra los Froilán Peralta?
—Hasta hace un tiempo me mantuve escéptico sobre la memoria de los más jóvenes, pero teniendo algunos encuentros y diálogos, me sorprendí muy gratamente al escuchar sus experiencias y cómo vivieron la gesta estudiantil. Me parece emocionante saber que nuestra lucha sirvió de guía e inspiración, que muchos de nuestros reclamos y métodos de lucha fueron apropiados por la gente, en especial los más jóvenes. Existe un legado de #UNANoTeCalles en la conciencia nacional.
—¿Cómo te sentís por haber sido parte de algo tan grande como el #UNANoTeCalles?
Me siento orgulloso de haber coincidido con personas asombrosas y valientes que hicieron posible lo imposible, que hayamos sido parte de un hito de la historia nacional. Evito referenciarme personalmente con #UNANoTeCalles, porque fue una lucha colectiva que no le pertenece a nadie. Estoy orgulloso de honrar todos los días, siendo el año 2023, los valores del movimiento estudiantil.
—¿Qué mensaje te gustaría dar a los estudiantes actuales?
—Me gustaría que se volviera a hablar de #UNANoTeCalles, de la historia de lucha del movimiento estudiantil en Paraguay, son experiencias que merecen ser rescatadas y dialogadas con los estudiantes del día de hoy.
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Las generaciones de estudiantes secundarios y universitarios de la última década tenemos muchas experiencias compartidas que son relevantes para rememorar. El pueblo paraguayo tan sufrido necesita de la fuerza de su juventud estudiante para caminar por las vías de las profundas transformaciones para la vida digna.
El caso #UNANoTeCalles y la condena de Froilán Peralta
El ex rector Froilán Peralta se entregó esta semana para cumplir su condena de tres años por lesión de confianza. Se determinó un perjuicio de más de G. 1.154 millones a la casa de estudios. La causa por cobro indebido de honorarios prescribió y no fue juzgado por ese delito.
La ex directora de Talento Humano de la Universidad Nacional de Asunción María del Carmen Martínez, conocida como la comepapeles, se entregó en setiembre para cumplir una condena de tres años y seis meses de prisión por estafa en la causa.
La causa de Froilán Peralta y de la también condenada, María del Carmen Martínez, comenzó a raíz de una investigación de Última Hora que había sacado a la luz las irregularidades administrativas que se realizaban en la Universidad Nacional de Asunción.
Esto derivó en el levantamiento de los estudiantes universitarios que tomaron el campus de la UNA, en San Lorenzo, el Día de la Primavera del 2015, lo que hizo que finalmente la Fiscalía abriera una pesquisa e imputara a varias personas.
