La boda de Sol Cartes y el joven empresario de la industria automotor Patrick Bendlin estaba prevista para el pasado 20 de junio, en la misma semana que arrancaba la fase 3 de la cuarentena inteligente. Sin embargo, se postergó para otra fecha debido, justamente, al avance de la pandemia del coronavirus.
Al principio se previó para el próximo año, pero pronto cambiaron los planes y la invitación al casamiento se cursó para este sábado, cuando se conmemoran los 483 años de fundación de Asunción.
Cada invitado recibió también una ficha con una indicación inusual: que para asistir al evento deben realizarse 72 horas antes el test del Covid-19. Los hisopados serán costeados por la organización y la presentación del resultado será de rigor.
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De acuerdo con la información a la que accedió Última Hora, la fiesta se realizará en el interior del país, en una zona que está en la fase 4 de la cuarentena inteligente y hasta el momento están confirmados 50 invitados. No se maneja con precisión el lugar.
La ceremonia religiosa se hará en la Catedral Metropolitana de Asunción con hasta 20 fieles, donde participarán solamente los familiares de la pareja.
El protocolo a seguir
La boda de la hija más joven del ex presidente Horacio Cartes cuenta con un protocolo sanitario propio que le fue enviado a todos los invitados. Este contiene medidas específicas para el momento previo del casamiento, uno general para el evento y otro para la ceremonia religiosa.
En el protocolo previo señala que hay una lista de invitados “con trazabilidad asegurada” sin excepción, refiriéndose a documentos y números telefónicos. En este punto, piden la realización obligatoria del hisopado nasofaríngeo, con agendamiento previo, 72 horas antes del evento.
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Esto implica la presentación de un archivo de cada una de las fichas de los resultados, y quedan exceptuadas las personas que tuvieron coronavirus y pueden demostrarlo con una prueba de sangre que no tenga más de 10 días de antigüedad.
Para el día de la fiesta se establece el lavado de manos y desinfección con alcohol en gel en el ingreso y de todos los elementos que porten, incluso celulares. Se hará la toma de temperatura y se ubicará a los invitados en mesas que no podrán ser cambiadas después.
Asimismo, contempla el uso estricto de mascarillas autorizadas por el Ministerio de Salud Pública “con triple tela y filtro de protección”. Incluye que el uso de protector facial será optativo y el de alfombra sanitizante no será necesario.
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Entre otras cosas, el saludo de personas que no sean del mismo núcleo deberá ser con el codo o choques de puño, de modo a evitar en lo posible el contacto físico. En el lugar habrá lavatorios disponibles y baños portátiles por sexo.
En cuanto a la boda religiosa, lo establecido es el distanciamiento de 2 metros en sentido lateral, uso de tapabocas, el lavado de manos previo a la comunión, que se recibirá en la mano y no directamente en la boca.
La ostentosa boda se dará en una de las etapas más complicadas del coronavirus en Paraguay, donde la cantidad de contagios y muertes se han incrementado. El propio ministro de Salud, Julio Mazzoleni, advirtió que agosto será “un mes complicado”.
Compromiso
Sol Cartes y Patrick Bendlin se comprometieron el año pasado. Él le pidió a ella matrimonio en Grecia. Hicieron una lujosa fiesta de compromiso el 24 de agosto de 2019.
Simbólicamente, la fecha en la que iba a ser al principio la boda, los novios aprovecharon esa noche para inaugurar su casa matrimonial, en compañía de sus amigos, virtualmente.
En torno a este futuro matrimonio otra cuestión que causó polémica en su momento fueron las extravagantes invitaciones 3D de la boda, que pedían un código de confirmación, incluían un audio, estaban acompañadas con dos cajas que contenían velas aromáticas, picadas de jamones, quesos, frutos secos, whisky o champán.
