Los dispositivos incautados en Aduana del Puente de la Amistad, en el Brasil, cuyo valor aproximado supera los 490.000 reales, unos G. 670 millones, estaban ocultos en un compartimento secreto instalado en la caja trasera de una camioneta con placas paraguayas.
El responsable del vehículo, un ciudadano brasileño que viajaba solo, fue arrestado en flagrancia y trasladado a la Delegación de la Policía Federal en Foz de Yguazú.
Estaba ingresando desde Ciudad del Este, Departamento de Alto Paraná. De acuerdo con los datos, era solo un pasero, no dueño de la mercadería. En Brasil a estas personas se las conoce como “laranja”.
Según informaron desde la Receita Federal, el ingreso de mercancías sin la debida declaración de importación y sin el pago correspondiente de impuestos constituye el delito de contrabando, tipificado en la legislación brasileña.
Los celulares y el vehículo fueron remitidos a la dependencia de la Receita Federal para continuar con los procedimientos administrativos y legales pertinentes.