23 may. 2024

“Queríamos quitar más gente, pero ya fue imposible”, dice rescatista

Luego del trágico accidente aéreo militar que se cobró la vida de siete personas, hablaron los militares que lograron rescatar al joven sobreviviente minutos antes que se propague el incendio.

Los héroes sin capa sí existen y estos fueron los que rescataron al único sobreviviente del accidente aéreo ocurrido el martes pasado en el predio de las Fuerzas Armadas. El teniente de aviación Amado González, quien sin dudar ante el peligro fue el primero que actuó, explicó que pese a que intentaron sacar a más gente, fue imposible por las explosiones y el incendio de la avioneta.

El martes 9 de febrero, una avioneta militar Cessna 402 se precipitó a tierra y estalló, falleciendo siete personas, mientras que un joven, José Daniel Zaván (19), fue el único sobreviviente. Los que ayudaron a rescatarlo fueron el teniente de Justicia Militar Ismael Villasanti, el suboficial Julio Ojeda y el teniente González.

Este último comentó para ÚH que ese día estaba cumpliendo funciones en su oficina, que está a 30 metros de donde cayó la aeronave Cessna 402. “Me estaba preparando para comenzar a trabajar y en eso escucho la explosión muy fuerte y salgo y veo una aeronave de la Fuerza Aérea”, recordó.

Fue rápidamente a la guardia de la Comandancia a pedir que llamen a bomberos, la ambulancia, y a los que estaban en servicio y luego él fue directo al avión.

“Encuentro un cuerpo (de Zaván) que estaba a metro y medio del fuselaje del avión y por la magnitud del accidente, tampoco podía arriesgar a moverle, porque le podía producir más daño; entonces, pido auxilio y en eso viene el teniente Villasanti y el suboficial Ojeda, y le retiramos”, explicó González, quien recién va asimilando lo ocurrido.

Ahí volvieron a tomar fuerzas para ingresar a sacar más personas y fue entonces que el incendio de la avioneta se hizo más grande. “Nuestra intención era quitar más gente, pero ya fue imposible, se estaba incendiando más”, detalló.

Aseguró que no sabía quién era el joven, pero como era un avión de las Fuerza Aérea pensó que era un camarada, “un compañero del aire”, pero no sabía que era un civil que venía para estudiar.

“No importó el peligro, siempre es lo que nosotros decimos, ‘hacer bien sin mirar a quién’. Su vida está en riesgo y si tenemos la posibilidad de aportar un granito de arena para que él esté mejor, hacemos”, sostuvo.

Recordó que José Zaván estaba inconsciente, pero demostraba signos vitales.

Por su parte, el teniente Ismael Villasanti dijo que estaba en su oficina también cuando cayó la avioneta.

”Siendo las 14:31 miré mi hora y momentos después ya escuché el fuerte impacto y un compañero me dijo que era un avión y le dije ‘no puede ser’ y salí a mirar y, efectivamente, era un avión de las Fuerzas Armadas y ya estaba en llamas”, explicó por su parte a Telefuturo. Dijo que sin dudar se acercó a auxiliar al joven.

En el caso del suboficial Ojeda, él detalló que se acercó también y entre los tres le pudieron sacar a Zaván del costado del avión.

“Lo más fuerte es que luego de dejarle al muchacho le vi a un camarada que estaba tendido también en el suelo y cuando intenté sacarlo volvió a explotar el avión. Ya no dio tiempo de sacarlo”, lamentó.

Ahora los tres militares esperar ir el fin de semana a visitar en el Hospital al joven sobreviviente, quien todavía se encuentra internado.

Pericia paralela
Cuatro abogados de los familiares del piloto coronel Mayor Aníbal Antonio Pérez Trigo acompañarán la investigación.
Explicó el abogado Gustavo Bogado que acompañarán las pericias. “También tenemos asesores en el extranjero, que solicitamos un parecer técnico de las piezas, no es por desconfianza de la familia, sino para que todo sea transparente”, detalló.
Explicó que se investigan los elementos humano (ya concluyó), operacional y material. Ahora se analiza la comunicación en la torre, en la cabina y luego viene la parte material. “Es investigación compleja”, señaló.

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