La grabación del circuito cerrado y algunos datos elevan la hipótesis de que hubo complicidad durante el atraco a un camión que transportaba mercaderías electrónicas por un valor de USD 100.000.
“Nos llama la atención el tiempo que se les dio a los delincuentes para huir. Se tardó en dar aviso a la policía. La hipótesis es que esto fue una entrega”, sostuvo Marcelino Espinoza, jefe del Departamento de Investigaciones del Área Central, en contacto con Monumental 1080 AM.
El jefe policial detalló que la tarea investigativa inició con base a la denuncia que se realizó mucho tiempo después de lo acontecido y eso levantó sospechas, ya que se dio mucho tiempo a los atacantes a que vacíen el camión.
“Lo que nos llama la atención es que le dio mucho tiempo a la gente a vaciar el camión y luego abandonar todo a un radio de no más de tres kilómetros. Nadie pidió auxilio a la Policía para una acción rápida”, afirmó.
Al respecto, indicó que esperan conseguir evidencias “contundentes a favor” de las víctimas, ya que ahora se sospecha de la presunta colaboración de los empleados.
“Esperemos que tengamos algo más contundente a favor de ellos. Hasta ahora, la duda va a que esto fue una entrega. Son dos funcionarios, uno es el fletero y el otro es el contratado para hacer llegar la mercadería hasta Ciudad del Este”, precisó.
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De acuerdo a los datos recabados, los delincuentes robaron un camión de la marca Mitsubishi Fuso, modelo Canter, de color azul, año 2012, con chapa ZAG 235, con productos electrónicos. Estaban vestidos como agentes de la Policía Nacional.
El conductor del camión, identificado como Roberto Espínola Torres, de 59 años, estaba acompañado por el comerciante Sindulfo Gamarra González, de 54 años, cuando fueron interceptados en la vía pública por cuatro hombres vestidos con uniforme policial y con precintas de Delitos Económicos.
Los trabajadores disminuyeron la marcha y fueron reducidos y maniatados. Posteriormente, fueron llevados a una zona boscosa, en la compañía Maramburé de Luque, donde fueron liberados.
Los asaltantes se dieron a la fuga a bordo del camión, que finalmente fue encontrado abandonado en una zona descampada del barrio Itapuamí.