El monitoreo hidrológico de la Compañía Paranaense de Energía a la 11:00 de la mañana de ayer indicó que el caudal era de 17,2 millones de litros por segundo de agua, con lo que se confirmó que el volumen volvió a subir.
El lunes pasado el caudal llegó a superar los 24 millones de litros por segundo, a consecuencia de más de 280 milímetros de lluvia caída en la Cuenca del río Iguazú, lo que obligó a varias represas ubicadas en el cauce superior a abrir sus compuertas.
La firma Urbia Cataratas, que administra el parque, cerró la pasarela luego de confirmar la información del aumento del volumen de agua.
El Parque Nacional Iguazú había ampliado el horario de acceso al público de 08:00 a 16:00 del 2 al 5 de noviembre, debido al feriado en el Brasil, en el que muchos hacen puente con el fin de semana.
La pasarela a la Garganta del Diablo es un sitio donde los turistas suelen quitar las imágenes para el recuerdo de su paso por el lugar, así como el paseo por agua, travesía que se realizaba en condiciones normales en un lanchón en el que los turistas podían apreciar desde el río el espectáculo natural.
Incluso, el aumento del caudal del río Iguazú también obligó a cerrar los paseos turísticos en las Cataratas, ya que también causan inundaciones de viviendas en toda la ribera del Iguazú Superior, así como la ciudad de Puerto Iguazú, ubicado en la Triple Frontera con el Paraguay y el Brasil.
El río Iguazú desemboca en el río Paraná frente a Presidente Franco, frenando el caudal del Paraná, lo que ocasiona un efecto de retroceso del cauce a la altura de Ciudad del Este, que está causando desde semanas atrás la inundación de los barrios San Rafael y San Agustín. EM