Temprano, pero ya están en las calles. El tajy o lapacho es uno de los árboles cuyas flores adornan las calles de Asunción. Luego del frío que sufrió el país en las últimas semanas, empezaron a aparecer las primeras flores de este árbol que no solo da una renovada imagen a las arterias de la capital paraguaya, sino también es estudiada por sus propiedades.
El sitio latinasalud.como detalla que el lapacho es un árbol autóctono del sur de América Latina. En Argentina, Paraguay, Perú, Brasil y Bolivia crece en forma natural y sus ejemplares pueden llegar a medir 45 metros de alto con troncos de casi dos metros de diámetro y grandes flores de color púrpura, detalla.
Cuenta además, que los guaraníes y otros grupos indígenas de la región utilizaban su madera para hacer utensilios y elementos varios. De hecho, en Brasil al árbol se lo llama Pau D’Arco, o sea, palo de arco, porque con su madera fabricaban flechas. Además, los indios lo tomaban en infusión para tratar distintas enfermedades como malaria, anemia, colitis, problemas respiratorios, resfriados, tos, gripe, fiebre, artritis y reumatismo.
En la actualidad, la madera del lapacho también es muy valorada por su gran calidad pero, en las últimas décadas el mayor interés que despierta esta especie vegetal está en sus virtudes como planta medicinal, señala el informe.
“El lapacho es un adaptógeno auténtico, incluso es un eficiente antioxidante. Además tiene acción antibacteriana, antiviral, antiinflamatoria, antifunguicida y laxante”, afirma Hugo Golberg, Vicepresidente de la Asociación Argentina de Fitomedicina, en la publicación dedicada a los estudios de salud.
En Alemania, Italia, Francia y Brasil - donde grupos científicos siguen estudiando sus propiedades - el interés científico está centrado en dos temas: el cáncer y el SIDA. Sobre esto, Golberg explica que “hay muchos trabajos de investigación científica hechos sobre la actividad anticancerígena del lapacho; y la actividad contra el HIV”.
El poder de los principios activos de la planta -dice el informe-, se encuentra en la corteza interna y se comercializa en diferentes formatos. También se vende para preparar infusiones y consumirlo en forma de té y se incluye en el preparado de cremas antiarrugas. Las bondades del lapacho se conocen y aprovechan en todo el mundo, y los principales países consumidores son Francia, Alemania, Inglaterra y Estados Unidos.