En la ocasión, la ex congresista remarcó que su expulsión del Congreso fue ilegal e impulsada por el sector que responde al oficialismo colorado, que tiene como objetivo principal concentrar el poder en un grupo minúsculo.
Además, González apuntó contra los ministros de la Corte, denunciando la “desidia y falta de coraje” para tratar la acción que presentó hace 198 días. En ese sentido, confirmó que repetirá el pedido cada semana y pidió a los representantes de la máxima instancia judicial a no ser cómplices de lo que ella llama una persecución política.
“No podemos permitir que se ordenen asesinatos políticos, silenciamiento de opositores… ¿Qué queda después?, ¿tener que esperar acá en la esquina un coche bomba o tener que esperar que se les asesine a periodistas porque en un Quincho se reúnen y dicen ‘queremos la cabeza de fulano o de mengano?’”, expresó a los medios tras presentar el urgimiento, en compañía del senador Ignacio Iramain y el diputado Raúl Benítez. Por último, resaltó que esta causa “ya no se trata de Kattya, se trata de nuestras instituciones, de un grupo de poder político y vandálico que hoy está cometiendo hechos sumamente graves en el Paraguay”.