La carga explosiva estaba oculta bajo tierra en una estancia colindante con la colonia indígena Mbokaja’i en el municipio de Capitán Bado, Departamento de Amambay, informó Marciano Candia, periodista de Última Hora.
El teniente coronel Luis Apesteguía, vocero de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), manifestó que detectaron el artefacto explosivo en un camino interno de la estancia denominada Cerro Guazú Porã.
Explicó que tienen infiltrados en la zona varios equipos de fuerzas especiales y uno de ellos encontró el explosivo.
Mencionó que enviaron hasta el lugar explosivistas del Comando de Operaciones de Defensa Interna (CODI) quienes pudieron desactivar.
“En realidad lo que hicieron es una explosión controlada del artefacto, evitando así lo que podía haber sido una tragedia”, agregó en conversación con un medio local.
Agregó que podía afectar a civiles que transitan por la zona y también a las fuerzas operativas.
“La carga estaba preparada como para detonar a distancia, a través de un teléfono”, expresó.
Aseguró que evidentemente era una trampa explosiva apuntada hacia los miembros de la FTC porque los grupos criminales que operan en la zona Norte del país siempre están pensando en dañarlos de alguna forma.
Por último, dijo que por los indicios, todo apunta a que los responsables del hecho serían miembros del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
La estancia se encuentra en plena zona roja del Cerro Guazú donde actualmente se encontraría la plana mayor del EPP, escondido entre las 22 comunidades indígenas que rodean el Cerro Guazú lugar sagrado del pueblo Pai Tavyterã.
El suboficial de la Policía Nacional Edelio Morínigo y el ex vicepresidente de la República Óscar Denis están secuestrados por el EPP, mientras que el ganadero Félix Urbieta está en cautiverio con el Ejército del Mariscal López (EML).