La hermosa decoración que quedó plasmada en fotografías para el recuerdo fue realizada por 12 estudiantes del último año de la carrera de Trabajo Social, de la Universidad Técnica de Comercialización y Desarrollo (UTCD).
Aprovecharon la cátedra de Práctica Institucional para que una novia, que es reclusa del Centro Penitenciario para Mujeres Casa del Buen Pastor, pase el mejor día de su vida a pesar de estar entre rejas.
Livio Araujo, uno de los estudiantes, contó a Última Hora que desde el inicio de este año trabajan con las mujeres privadas de libertad que se encuentran en el pabellón denominado Amanecer.
Relató que siempre visitan a las internas y se enteraron de que una de ellas iba a casarse, por lo que decidieron ser los encargados de organizar toda la decoración para el mágico día de bodas, que fue este sábado.
Hace dos semanas se pusieron en campaña para organizar la celebración, durante la cual la pareja se unió ante Dios.
Decoraron botellas con los nombres de los novios, que se utilizaron como centros de mesa, y también hicieron algunos recuerdos para los presentes. Detrás de la mesa que exhibía la torta, se observaba además un arreglo con telas y en el camino había una alfombra roja.
“De todo el decorado nos encargamos nosotros, también colocamos botellas reclicladas como centro de mesa, llevamos cosas dulces”, relató Araujo.
Incluso se encargaron del alquiler de sillas, mesas y manteles, que se colocaron en el patio para que los recién casados pudieran compartir un brindis con sus familiares y amigos, quienes los acompañaron en la celebración religiosa y civil.
“Es la primera vez que nos toca hacer una boda en el penal del Buen Pastor, me pareció bastante buena la idea, más allá de que ella esté ahí cumpliendo una condena, está en su derecho de contraer matrimonio. No es algo que pasa todos los días; pero, de repente, se da”, contó.
Los nombres de los recién casados se omiten por decisión de la novia.
El estudiante refirió que hasta el mes de setiembre estarán brindando asistencia a las mujeres privadas de libertad; entre las actividades que realizan, enseñan manicura a las reclusas.
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Este sábado, en horas de la mañana, otras nueve parejas decidieron unir sus vidas, pese a encotrarse tras las rejas. El matrimonio comunitario fue realizado en el Pabellón Libertad de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú.
El momento fue bastante emotivo para los familiares y amigos que compartieron con los novios el momento tan especial.
Con el matrimonio se busca que los reclusos tengan una reinserción espiritual, informaron desde el Ministerio de Justicia.
