Por las constantes lluvias que registra la ciudad y con el sistema de desagüe totalmente tapado de basura por falta de mantenimiento, junta agua, quieta y estancada. Muchos temen que esté sirviendo como un gran criadero de mosquitos, por lo que se pide la intervención correspondiente por parte de la Comuna.
Necesita igualmente limpieza y corte de pasto que cubre gran parte del parque. Las barras protectoras de círculo de cemento, que sirve para la práctica de patinaje, ubicado al costado sur de la estructura, están rotas y con puntas, que pueden ser peligrosas para los niños.
Todo el sistema de iluminación se encuentra con problemas. Los faros del paseo central, que conduce hasta la estatua del Generalísimo Chiang Kai-shek, que gobernó Taiwán desde 1949 hasta su muerte en 1975, están rotos y destrozados.
El barco de cemento, ubicado al costado del pequeño lago artificial, se encuentra sucio, con todos los adornos robados, presentando un aspecto que no es ni la sombra de lo que fue en sus mejores días en los años 80 y 90, graficando el carácter cosmopolita que tiene la ciudad. La decadente imagen contrasta totalmente con los preparativos para la celebración, el próximo 3 de febrero, del aniversario fundacional número 67 de Ciudad del Este.
UN REGALO. Este espacio fue inaugurado en 1984, con la presencia del entonces presidente de la República, Alfredo Stroessner, quien estuvo acompañado de sus principales colaboradores, además de las autoridades municipales de aquel tiempo y los principales referentes de la colectividad taiwanesa que residía en esta parte del país. Fue un regalo por el aniversario 27 de la entonces Puerto Presidente Stroessner.
Fue un regalo de la comunidad taiwanés al Paraguay como un símbolo de la amistad entre los dos países. Ellos tuvieron a su cargo todo el diseño. Cuenta con una estatua del Generalísimo Chiang Kai-shek, un paseo peatonal en forma de doble diez, el signo de dos cruces unidas que simboliza el 10 de octubre, el día nacional de la República de China (Taiwán), una plaza polifuncional, un kiosco y un lago artificial con una fuente, un pabellón flotante y un puente zigzagueante.
Todo el diseño está relacionado con la cultura china, con materiales y pinturas que imitan un espacio chino. La obra fue financiada totalmente por la comunidad taiwanesa en Ciudad del Este, reuniendo, por aquellos años, un fondo de unos USD 260 mil. La Municipalidad, a cargo en aquellos años, por el ya desaparecido Carlos Barreto Sarubbi, donó la punta del hoy ex aeropuerto Alejo García para ejecutar el proyecto.