08 nov. 2024

El tango que cantó Gardel

La melodía de un tango, Margaritas, compuesta por este músico, con letra de Coria Peñaloza, el que escribió Caminito, ganó un concurso en Buenos Aires en 1928 y fue grabado nada menos que por Carlos Gardel.

César González Páez

cesarpaez@uhora.com.py

Hablamos de Juan Carlos Moreno González, un músico que ganó la simpatía por sus composiciones, de dos culturas, la argentina y la paraguaya. Aquí nos basta para presentarlo decir que fue quien puso la melodía a la zarzuela La tejedora de ñandutí, con textos de Manuel Frutos Pane. En Argentina su música se incorporó en la voz de uno de los máximos ídolos de ese país, el legendario Carlos Gardel. El Morocho del abasto eligió el tango Margaritas para su repertorio. Ese tango había participado y ganado en un concurso organizado por la casa grabadora Max Glücksmann. Un sello importante por entonces que convocó a un talentoso jurado que eligió esta pieza entre más de mil canciones. Para tener una idea de quiénes estaban en la tarea de otorgar el premio, baste nombrar a dos íconos de la música rioplatense: Francisco Canaro y Roberto Firpo.

FUENTES. Si hay algo que confunde en las biografías que los investigadores buscan, son las distintas fuentes que dan datos que terminan confundiendo. El Diccionario de la Música Paraguaya de Luis Szarán, por ejemplo, dice que nació en Asunción un 19 de febrero de 1916. La fecha y el lugar son correctos, pero en la página web de Todo Tango se señala que fue en 1913. Otras fuentes, que en 1912. El Dr. Juan Max Boettner, en una histórica conferencia dictada en el Ateneo Paraguayo en 1948, señala que nació en 1911.

Pero dejemos ese detalle para entrar a contar todo el caudal de composiciones que dejó para la posteridad. Es autor también de canciones populares como Pobre pebeta, Con tarjeta de cartón, esta canción con letra del gran poeta popular argentino Raúl González Tuñón, Mi casita y Cuando era buena. En el campo sinfónico dejó títulos como Kuarahy mimby (La flauta del sol), Movimiento de concierto para piano, Paraguay koê para coro y orquesta. Su creatividad se volcó en melodías para piano como Tres aires paraguayos o Sonata para piano, y con libretos de Manuel Frutos Pane puso música a lo que se denominó zarzuela paraguaya, dejando estos títulos: La tejedora de ñandutí, María Pacurí, Las alegres kygua vera y Paloma parã.

SU TESTIMONIO. Pero volvamos a ese momento que el tango Margaritas ganó el concurso. Fue el propio Carlos Gardel el que se presentó en su casa para decirle que había ganado. La página web Todo Tango incorpora esta anécdota que el mismo compositor cuenta cómo ocurrió ese momento que comenzó con una confusión: “Cuando sonó el timbre de mi casa yo mismo abrí la puerta y me encontré ante un hombre a quien yo conocía mucho por fotografía:

- Pibe... - me dijo- . Deseo hablar con tu padre.

- Mi padre - respondí- está en el Brasil; es el embajador del Paraguay en Río. Si usted quiere dejar algo dicho, yo puedo escribirle.

Gardel puso cara de asombro y dijo:

- Quiero que le digas que su canción Margaritas obtuvo el gran Premio de Honor. Apenas yo pude contestar.

- Mi padre no hace canciones. Él es diplomático e historiador.

- ¿Quién, entonces, hace tangos en esta casa? - preguntó Gardel casi con enojo.

Con voz culpable, como si hubiera cometido un delito, le contesté temblando:

- Yo señor soy el que hizo la música de Margaritas.

Apareció una amplia sonrisa en el rostro bondadoso de Carlitos y acercándose me besó.”

Un interesante relato para abrir la posibilidad de conocer a este músico de ricas vertientes creativas. También escribió numerosos artículos de música en la revista del Ateneo Paraguayo y es autor de Apuntes para la historia de la música del Paraguay, editado en 1982. Falleció un año después en esta capital.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.