Esta tarde, en un comunicado oficial, el obispo Collar señaló que se llevará a cabo una investigación “rigurosa para esclarecer la situación y tomar las decisiones necesarias. En estos momentos, hacemos un llamado a la calma y serenidad”, menciona parte del escrito.
Al ser abordado sobre el tema, Collar dijo que dialogó con el afectado, quien comprende su situación y se someterá a la investigación. Por el momento, Montiel ya no cumplirá funciones sacerdotales en la Diócesis.
“Hablé con él, le dije que dejará temporalmente su oficio y también la parroquia, para las averiguaciones correspondientes. Además, esto le favorecerá en este momento. Es necesario”, explicó.
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Añadió que Montiel aceptó la decisión, aunque con dolor, y que este primer paso se documentará por escrito.
“Respondió positivamente. Ya se dio ese primer paso. Luego, avanzaremos con más preguntas, pero esa parte, la de averiguación, corresponderá a otro organismo que también tenemos en nuestra Diócesis”, expresó.
Collar refirió que se ha iniciado lo que se denomina una investigación previa, la cual queda a cargo del Tribunal Eclesiástico Diocesano. El obispo cuenta en esta instancia con un vicario judicial que lo representa.
“Él fue muy sincero. Me comentó, sin entrar en muchos detalles, que toda esta situación no es acorde con su consagración sacerdotal y que data de hace aproximadamente un año, antes de que yo llegara”, relató el obispo.
Asimismo, agregó: “Y justamente ahora, con esta situación, vuelve a surgir. Por eso es importante la investigación. Su actitud es muy abierta, muy sincera. Somos humanos, pero cuando uno acepta una consagración y tiene una misión, debe adecuar su conducta”.