La reacción del oficialismo es ante la victoria que tuvo la disidencia que terminó eligiendo al diputado Ariel Oviedo como presidente de la Comisión Permanente, con lo que se reduce la posibilidad de que se llame a sesión para tratar el proyecto de enmienda.
El senador cartista, Gustavo Pipo Alfonso, acompañó ayer al presidente Horacio Cartes durante un recorrido que hizo en la zona de obras del complejo habitacional conocido como San Francisco, en Viñas Cué. Al ser consultado sobre el nuevo escenario político que tiene a la disidencia a cargo del Congreso durante el receso, el legislador respondió que el artículo 184 de la Constitución Nacional establece que existen vías legales para convocar a una sesión. Entre ellas, mencionó que incluso el Poder Ejecutivo, a través de un decreto, puede pedir que se convoque a sesión y la convocatoria debe darse en un plazo de 48 horas.
Indicó que la Comisión Permanente tiene facultad de convocar a sesiones y que “existen todos los mecanismos para que nadie pueda trabar nada”.
Alfonso acotó que en caso de que se necesite para cualquier cosa una sesión extraordinaria existen tres mecanismos. El primero es que la sesión se puede llamar cuando pide la cuarta parte de los miembros de cualquiera de las Cámaras, (20 diputados o 12 senadores), los dos tercios de los miembros de la Comisión Permanente o por decreto del Poder Ejecutivo.