23 may. 2024

Falsa funcionaria tenía seguro doméstico

Lilia Iluminada Amarilla Ferreira (34) no solo se jactaba de ser funcionaria de la Dirección de Aporte Obrero Patronal (AOP) del Instituto de Previsión Social (IPS) sin ni siquiera tener contrato, sino que también fue beneficiada con el seguro doméstico por más de un año, según documentaciones a las que accedió ÚH.

Pedido.  Esta es la nota de  pedido de Nery Cañete para la contratación de Lilia  Amarilla en el cargo de asistente.

Pedido. Esta es la nota de pedido de Nery Cañete para la contratación de Lilia Amarilla en el cargo de asistente.

Tras la denuncia periodística, el director de AOP, Nery Cañete Ferreira, confirmó que Lilia Amarilla figuraba como asegurada en este rango con 12 meses de aporte. Por la situación irregular, se procedió a darle de baja, confirmó Cañete, quien le restó importancia al hecho.

Al ser insistido si sabía o no que la persona por la que solicitó contratación tenía el seguro doméstico, señaló que desconocía el hecho. En ese sentido, argumentó que existen muchos casos de personas que fueron dadas de baja por estar irregularmente en el sistema.

NO SE FISCALIZÓ. “Ya corroboramos y ya está borrado. Ya se le sacó, porque no corresponde”, dijo Cañete, al tiempo de añadir que en este caso no se realizó la fiscalización in situ, pese a ser un requisito para verificar la situación de los trabajadores domésticos. El equipo de ÚH verificó el sistema y constató que la joven ahora ya no figura con el seguro.

Desde octubre hasta el pasado jueves 17 de noviembre, la joven fungía de funcionaria de AOP, sin tener contrato, pero accedía a información confidencial de empleadores.

El titular de AOP, Nery Cañete, solicitó la contratación mediante una nota interna del pasado 20 de octubre para el cargo de asistente, por un periodo de tres meses. Pero este pedido se rechazó debido a que los contratos deben hacerse por concurso público de oposición, señaló el gerente de Desarrollo, Iván Sosa.

Sin pudor, el director Nery Cañete confirmó que Lilia Amarilla trabajó en la dependencia supuestamente ad honórem, pero que ya no se desempeña en la institución.

Más contenido de esta sección
Demasiados episodios grotescos en una semana como para no dedicarles unas líneas.
Tras las impactantes revelaciones que se obtuvieron con la operación Dakovo, que logró exponer tan explícitamente los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas, sobrevino una situación por de más escandalosa: la implicación de altos militares en actividades criminales. Esta fue sin dudas una dolorosa comprobación del elevado nivel de infiltración del poder mafioso dentro de las instituciones del Estado paraguayo. Además de ser profundamente vergonzoso, esto implica un ataque a la democracia.
El Congreso Nacional rompió récord esta semana con el proyecto de la ley de superintendencia; los senadores tardaron 15 minutos para aprobar; los diputados 11 minutos. En una convulsionada jornada, los diputados también aprobaron ley que suaviza penas para corruptos y los senadores salvaron al cartista Hernán Rivas, acusado de tener un título falso de abogado. Y como les quedó tiempo, también mutilaron la ley de puerta giratoria. Este es el espantoso combo navideño que el Parlamento le ofrece al pueblo paraguayo.
Los impactantes resultados de la operación Dakovo lograron exponer en forma explícita los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas. En nuestro país, logró la detención de más de una decena de personas involucradas en un esquema de tráfico internacional de armas y una nota gravísima, entre los detenidos están un militar de alto rango así como ex funcionarios de la Dimabel. Es muy preocupante la manera en que la mafia y el crimen organizado están socavando nuestra soberanía y nuestra democracia.
No fabricamos armas, pero las comercializamos en cantidad industrial. No producimos cocaína, pero el país es depósito, ruta y puerto de embarque de cantidades industriales que llegan a los principales mercados del mundo.
Eduardo Nakayama abandona el PLRA. Solo y apresuradamente, dicen. Quién sabe. Explica que no ve ninguna posibilidad de que su partido pueda desprenderse de la infiltración cartista. Desde adentro ya no hay nada que hacer, sostiene.