Porfiria Ocholasky, secretaria general del Sindicato de Funcionarios Judiciales del Paraguay (Sifjupar), el principal gremio, señaló que deben llegar a esto para que sean escuchados.
Refirió que hace 14 años no tienen aumento de salario y varios de los funcionarios, entre ellos, ujieres, oficiales de secretaría y dactilógrafos, tienen un salario inferior al mínimo legal.
Explicó que pese a esta situación, igual siguen prestando óptimos servicios a la ciudadanía, lo que calificó de indignante, más para el Poder Judicial.
La sindicalista indicó que la huelga se daría el 10 de noviembre, como máximo el 14, teniendo en cuenta los requisitos que debe tener, según la ley laboral.
Esto es, la asamblea general de los asociados, la aprobación de la huelga, la conformación del comité de huelga, el aviso al Ministerio del Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS), que debe convocar a una reunión tripartita y, finalmente, la huelga si no existe una solución.
Ocholasky apuntó que hace rato hacen lobby en la Cámara de Diputados y de Senadores, para hablar con los legisladores, pero en algunos casos reciben maltratos y ofensas. Incluso, dijo que esperaron por cuatro horas al senador José Rodríguez.
Remarcó que tienen apoyo de los demás gremios, entre ellos, la asociación de ujieres y de los actuarios judiciales. Además, apuntó que son el sindicato que aglutina a la mayor cantidad de funcionarios y que los que no son asociados igual podían acoplarse.
Esta semana se hará la asamblea para tomar la decisión de ir a la huelga general, con la presencia de los demás gremios.
La misma aseguró que tienen unos tres mil asociados, teniendo en cuenta los requisitos que tiene el MTESS, para los sindicatos, con lo que muchas veces les cuesta reunirse a todos los asociados, aunque el requisito era la mitad más uno de los miembros.