El franjeado encontró un patrón de juego y fue certero a la hora de definir las situaciones de gol. La contundencia que estuvo ausente en juegos anteriores se hizo presente y con su mejor arma, el juego aéreo, subyugó a los tricolores. En la primera parte fueron claros dominadores y sentenciaron el lance. En la complementaria, Nacional reaccionó, pero la mala fortuna frente al arco de Centurión se hizo notar. El golero franjeado tuvo atinadas intervenciones y el palo estuvo hacia el elenco franjeado.
Movilidad. En comparación a juegos anteriores, Olimpia encontró buenas conexiones entre sus futbolistas especialmente desde el medio sector hacia adelante. González fue determinante a la hora de elaborar jugadas y desequilibrar con sus gambetas. Nery Cardozo, quien se hizo sentir en el marcador rápidamente (2’), se mostró ligero y con hambre de gol. Clar y Báez fueron opciones de salida por los costados y tuvieron mucha participación en ataque.
Goleador. Julio Manzur volvió a convertir con la casaca franjeada y acumula tres tantos en el torneo. El capitán se arrojó de palomita en el área rival y aplicó un certero cabezazo a los 26’ tras recibir un buen centro de falta de Esteban Ramírez.
Olimpia despertó a tiempo en el torneo a la puerta de un choque trascendental ante el líder del torneo (Libertad) la próxima semana, logrando poner paños fríos a los inconvenientes económicos que vive en la actualidad.