“Debemos permanecer atentos a lo que concierne la migración de conocimientos” desde Alemania, declaró el presidente de los servicios de inteligencia exterior alemanes (BND), Bruno Kahl, interrogado por diputados del Bundestag, la Cámara Baja del Parlamento alemán.
China “trata de apropiarse por medio de ciberataques en Alemania del saber científico y económico para alcanzar en 2049", año del centenario de la toma de poder de los comunistas, su objetivo de ser la primera potencia mundial, agregó Kahl, advirtiendo que en el sector había demasiada “confianza e ingenuidad”.
El presidente de la Oficina Federal de la Protección de la Constitución (servicios de inteligencia interna), Thomas Haldenwang, mostró la misma desconfianza hacia Pekín.
Los peligros
Haldenwang alertó sobre los peligros que podía representar el control por parte de China de importantes infraestructuras técnicas.
La dependencia de la economía alemana de la china es cada vez más tema de preocupación para Berlín, que llama a las grandes empresas a diversificar sus alianzas comerciales.
Pero estas no parecen preparadas para decir adiós a ese enorme mercado: el pasado jueves, el gigante del automóvil Volkswagen anunció una inversión de € 2.400 millones en un acuerdo entre su rama de software Cariad y el chino Horizon Robotics, especializado en inteligencia artificial para desarrollar la conducción autónoma en China.