La Cámara de Senadores, con 21 votos en contra, rechazó ayer el pedido de pérdida de investidura del liberal Enrique Salyn Buzarquis. En total, 11 senadores apoyaron el proyecto de resolución y 3 se abstuvieron de votar.
Fue Enrique Riera quien habló vehementemente a favor de la pérdida de investidura. El pedido fue justamente del cartismo, aunque llevaba la firma de legisladores de otras bancadas. Riera señaló que Buzarquis lo maltrató, personalizando la solicitud, sin explicar su situación jurídica. Afirmó que el liberal tenía una condena que lo inhabilitaba para ser senador. “El senador es un delincuente, aceptó la salida procesal, debería perder la investidura”, aseveró Riera.
Acusó a sus colegas de ser selectivos en las condenas, expresando que cuando se trata de un legislador colorado los parlamentarios son duros y no tienen compasión, pero ahora que el acusado era un liberal tuvieron piedad de él.
Sergio Godoy también solicitó la pérdida de investidura, recordando que Buzarquis usó indebidamente un certificado médico de contenido falso para no asistir al juzgado, en el caso de una denuncia por usurpación de funciones públicas. Sostuvo que el parlamentario azul violó el régimen de inhabilidades. Sucede que en junio de 2017, Buzarquis había pedido la suspensión de la audiencia preliminar dentro del proceso que entonces enfrentaba por lesión de confianza y usurpación de funciones públicas, alegando un reposo que no era tal, ya que en realidad él había viajado a Uruguay.
Defensa. Por su parte, Buzarquis dijo que nunca fue condenado, ni tampoco tenía incompatibilidades para ser senador. Añadió que menos aún traficó influencias, ya que ni siquiera era candidato cuando se denunciaron los hechos en su contra. Expresó que estaba seguro de que no iban a alcanzar los votos para destituirlo, porque sus colegas iban a respetar la Constitución Nacional. Aludió que todo fue una campaña del cartismo pero no tuvo eco.
Por otro lado, durante la sesión, el liberal Víctor Ríos defendió a su correligionario, y resaltó que hubo una suspensión condicional del procedimiento, por lo que no se llegó al estadio de la sentencia. Precisó que por admitir el hecho del que se lo acusaba no significa que Buzarquis haya admitido “la culpa”.
A su vez, la senadora patriaqueridista Georgia Arrúa refirió que no se puede abrir una temporada de caza de brujas en el Senado, donde los legisladores sean blancos de las vendettas particulares. “No corresponde la pérdida de investidura”, insistió; mientras que el colorado Rodolfo Friedmann, quien votó contra la pérdida de investidura, pidió que se aplique el código de ética a Riera por haber faltado el respeto a los senadores en medio de su acusación a Buzarquis, ya que dijo que los que no votaban por expulsar al liberal estaban a favor de la impunidad.