El sistema público de salud tuvo un inédito crecimiento durante la pandemia del Covid-19. Casi se duplicaron las camas de terapia intensiva (de 304, en enero, se pasó a unas 570); con toda la inversión que eso implica en materia de más medicamentos e insumos hospitalarios. Además, unos 5.100 trabajadores de blanco (médicos y profesionales del sector de enfermería, en su mayoría) fueron contratados para reforzar la primera línea de los hospitales.
Pero el Ministerio de Salud Pública (MSP) todavía no cuenta con el presupuesto necesario para sostener esas inversiones y dar continuidad a los contratos durante el año 2021. Lo confirmó el propio ministro Julio Mazzoleni, el viernes último. Al ser consultado por ÚH si está asegurado el fondo para los contratados en el marco de la contingencia, dijo llanamente: “No, no está aún”. “Es una dificultad grande que tenemos porque tanto la Ley de Emergencia como el presupuesto de Salud Pública han sido orientados a un crecimiento enorme que se ha dado y, justamente, a nuestra presentación al Parlamento del presupuesto hemos señalado esa gran preocupación y el gran desafío de la sostenibilidad de este crecimiento”, resaltó. Están haciendo lobby –dijo– en el Congreso y ven que hay predisposición para autorizar más recursos financieros para el efecto. “Estamos trabajando muy de cerca con el Parlamento Nacional; en varias ocasiones, hemos visitado la Comisión Bicameral después de nuestra presentación formal y en todas hemos encontrado una excelente predisposición de su presidente y de todos sus componentes. Y confiamos que vamos a poder encontrar la forma de poder sostener eso y no solamente los recursos humanos, que son lo principal, sino también lo relacionado con la parte de insumos y medicamentos que aumentan significativamente”, expuso. Mazzoleni apuntó que las terapias son las que demandan una “altísima contribución de recursos humanos, de insumos y de medicamentos”; mayor de lo que tiene un establecimiento de menor complejidad. “Eso es lo difícil porque la inversión típicamente es inicialmente alta y después hay que hacer algún cambio, mantenimiento después de unos años dependiendo del tipo de equipos (...). La Ley de Emergencias nos ha permitido hacer ese crecimiento, pero no estaba previsto el sostenimiento. Entonces, ese es un arduo trabajo que tenemos todos no solamente en el Ministerio de Salud, sino la gente del Parlamento y estamos encaminados para poder hacerlo”, sostuvo el ministro. SEGUNDA OLA Mazzoleni apuntó la necesidad de que el Presupuesto 2021 de Salud contemple la “eventualidad de que pudiera darse esa segunda ola” de Covid-19. Esto es probable, tal como sucede hoy en Europa. “La situación de Paraguay es muy peculiar porque ha logrado empujar su pico por varios meses. Ese embate de la peor parte de la epidemia hasta aquí se ha dado con un pueblo educado; con una preparación del sistema de salud”, indicó. Emma Martini, jefa de Recursos Humanos del MSP, explicó que para sostener los contratos por contingencia necesitan G. 287.000.000.000, USD 41.600.000 al cambio actual, para al menos 5.100 contratados.
RECURSOS. La cartera sanitaria precisa más de USD 41 millones para asegurar continuidad de unos 5.100 contratados.
El problema principal es sostener medicamentos, insumos y recursos humanos que no estaban planificados.
Julio Mazzoleni,
ministro de Salud.
NUEVO VIRUS DEL SIGLO
41.600.000
dólares necesita el Ministerio de Salud para sostener la continuidad de unos 5.100 contratados desde marzo.