El escrito explica que las personas civiles, instituciones y empresas privadas deberán desistir del uso de cualquier tipo de uniforme similar al de las FF.AA., especialmente el camuflado.
El objetivo es evitar molestias innecesarias que constituyen una transgresión de las normas legales, reza el documento.
Indica además que las prendas de ese tipo también son mal utilizadas por delincuentes o grupos armados, lo que genera gran confusión en la ciudadanía.
El comunicado advierte que en caso de hallar uniformes militares en poder de personas civiles, serán requisados y los infractores serán denunciados ante las autoridades competentes.
La Dirección de Comunicación Social del Comando de las Fuerzas Militares anuncia además que realizará controles en todo el territorio nacional con el fin de dar cumplimiento a lo establecido en la ley.