Las protestas, convocadas por la mayor coalición opositora –la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)- se desarrollaron con normalidad y sin incidentes reseñables en la mayoría de las ciudades, salvo excepciones, como en Cagua (estado Aragua, norte), donde el partido Vente Venezuela (VV), denunció que los manifestantes fueron reprimidos con bombas lacrimógenas.
También en el estado Sucre (noreste), según reportaron medios locales con pruebas audiovisuales, motorizados identificados como “colectivos chavistas” lanzaron bombas lacrimógenas contra una manifestación pacífica, que continuó a pocos metros del lugar, a pesar de todo.
Mientras, en la región de Barinas (oeste), prosiguió VV, los ciudadanos salieron a las calles a “rezar por la paz”, por el cese de la persecución, por los “caídos”, así como por los “presos políticos”.
La formación indicó que en Anaco y Valencia, los venezolanos exigieron el respeto a la “soberanía popular” expresada el pasado domingo en las elecciones presidenciales.
La líder opositora de Venezuela María Corina Machado fue recibida por miles de manifestantes en Caracas, luego de haber declarado que teme por su vida.
Machado abogó por mantener una lucha “pacífica y cívica” pero con “fuerza” ya que, dijo, las elecciones del 28 de julio marcaron un “hito” sobre el cual se inició la “transición a la democracia” en la nación caribeña.
Machado destacó la fuerza de los ciudadanos que han salido a las calles a pesar de la represión contra las manifestaciones que se registraron entre lunes y martes pasados, en rechazo a los resultados electorales oficiales que dieron como ganador a Maduro.
“Después de una brutal represión, creyeron que nos iban a callar, atemorizar o paralizar, la presencia de cada uno de ustedes aquí demuestra al mundo la magnitud de la fuerza y lo que significa que vamos a llegar hasta el final”, dijo.
Esta es la segunda manifestación de gran magnitud que se lleva a cabo a instancias de la oposición mayoritaria, que reclama que su abanderado en las presidenciales, Edmundo González Urrutia, ganó las elecciones por un amplio margen, apoyando su afirmación en el 80% de las actas de votación que asegura tener en su poder y que ha subido a una página web.
Sin embargo, el chavismo insiste en que la documentación puesta a disposición de los ciudadanos por parte de la oposición no es real, mientras el Consejo Nacional Electoral no ha hecho públicas las actas que, asegura, entregará al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), si así lo requiere.
Los venezolanos residentes en otros países latinoamericanos y en España también se plegaron a las protestas masivas en las calles. Vilma Arévalo, coordinadora de la oposición en México, afirmó que la concentración “es para decirle al mundo que hubo fraude en Venezuela”.
El presidente Nicolás Maduro denunció ayer un plan para “usurpar” el poder, en una jornada de marchas en Venezuela. Miles de chavistas marcharon en defensa de la proclamación de Maduro, quien insiste en que las denuncias de fraude forman parte de un plan de golpe de Estado en su contra y advirtió que “no se aceptará, con las leyes nacionales, que se pretenda usurpar nuevamente la presidencia”, trazando un paralelismo con el reconocimiento internacional que recibió Juan Guaidó en 2019. AFP