La calificadora internacional Fitch Ratings mantuvo la nota de Paraguay en ‘BB+', pero mejoró la perspectiva de Estable a Positiva, destacando que el Gobierno mantiene una trayectoria de políticas macroeconómicas “prudentes” y un nivel de deuda bajo en comparación con países de similar calificación.
Sin embargo, señaló que aún persisten debilidades estructurales para avanzar hacia el grado de inversión, como la limitada base tributaria, el déficit creciente del sistema de jubilaciones públicas y la deuda pública, compuesto mayormente por moneda extranjera.
“Mejora de la flexibilidad fiscal mediante la reducción de la ratio deuda pública/PIB, la ampliación de la base de ingresos y la solución del déficit de pensiones del sector público, así como una mejora en la composición monetaria de la deuda pública”, señaló Fitch como principales indicadores o factores que “podrían conducir a una acción positiva/mejora de la calificación”.
A nivel macro, habló de lograr una mayor confianza en un mayor crecimiento en medio del contexto de estabilidad macroeconómica y avances en proyectos de inversión a gran escala, lo que promueve la diversificación económica y aumenta las perspectivas de convergencia del PIB per cápita con los países con calificaciones soberanas más altas.
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Resaltó a su vez que Paraguay inició una disminución gradual de la deuda pública y que, impulsado por menores déficits y un tipo de cambio más fuerte, se espera que dichos compromisos se reduzcan al 35% en 2025 y al 34% para dentro de dos años.
Además, destacó que por segundo año consecutivo el país emitió bonos globales en guaraníes, por USD 600 millones en febrero, lo que contribuyó a reducir la proporción de la deuda en moneda extranjera, llegando al 84,2% en agosto, desde el 90% a finales de 2023, así como la reciente apertura del mercado local a inversores no residentes.
Déficit de Caja Fiscal
En cuanto al sistema previsional, la calificadora enfatizó la urgencia de una reforma de la Caja Fiscal, que “sigue en la agenda del Gobierno y probablemente requerirá mayor capital político que las reformas anteriores, dados los cambios paramétricos necesarios en las edades de jubilación del sector público”.
Actualmente, la Caja Fiscal ya acumula a agosto un total de G. 1,6 billones o USD 234,5 millones al cambio aproximado actual, lo que implica el 43% de déficit, generando un fuerte peso para las finanzas.
La calificadora advirtió que mantener déficits bajos conforme a la regla fiscal demandará “un esfuerzo fiscal compensatorio en los próximos años para compensar el creciente déficit del sistema de pensiones del sector público”.
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Recordó que, según un nuevo estudio actuarial, este déficit podría aumentar del 0,5% del PIB al 1,5% en 2028. “El impacto fiscal de cualquier reforma probablemente será gradual, por lo que podría ser necesario un mayor esfuerzo fiscal”, concluyó.
Fitch subraya que las mejoras en gobernanza y transparencia, junto con el fortalecimiento institucional, serán determinantes para una eventual subida de calificación.
“Sus calificaciones se ven limitadas por indicadores de gobernanza deficientes, una base de ingresos baja, un mercado de capitales local poco profundo que limita la flexibilidad del financiamiento fiscal y la vulnerabilidad a choques climáticos adversos”, resaltó a su vez.
Reiteró que los factores que podrían conducir a una rebaja incluyen “un aumento de la deuda pública respecto del PIB debido a la incapacidad de mantener bajos déficits fiscales o de abordar las presiones estructurales del gasto”.
Pese a estas advertencias o debilidades expuestas, la revisión de la perspectiva a positiva refleja la confianza en el sólido crecimiento económico, la reducción prevista de la carga de la deuda pública, así como los avances en reformas económicas.