18 nov. 2025

Los humanos hablan más despacio con los perros para mejorar la comprensión

Los humanos ralentizan el habla cuando se dirigen a sus perros porque el ritmo más lento se adapta a la capacidad receptiva del animal, lo que permite que entiendan mejor las órdenes.

Perros.jpg

Los humanos ralentizan el habla cuando se dirigen a sus perros.

Foto: Archivo

Las personas hablan mucho más rápido que los perros, con una frecuencia de unas cuatro sílabas por segundo, mientras que los canes ladran, gruñen y gimotean a una velocidad de unas dos vocalizaciones por segundo.

Pero al dirigirse a los perros, los humanos ralentizan el habla a unas tres sílabas por segundo, según un estudio que publica Plos Biology a cargo de un equipo investigador de la Universidad de Ginebra.

El equipo analizó los sonidos vocales de 30 perros, 27 personas de cinco idiomas que hablaban con otras y 22 humanos de esos mismos idiomas que se dirigían a los animales. Además, usaron la electroencefalografía (EEG) para examinar las respuestas cerebrales.

Las señales de electroencefalograma de humanos y canes mostraron que las respuestas neuronales de los perros al habla se centran en ritmos delta, mientras que las de las personas se centran en ritmos theta, que son más rápidos, señala la revista.

Puede leer: Los perros sí entienden a los humanos, afirma nuevo estudio

Los autores destacaron, además, como un rasgo interesante que “mientras los perros utilizan el ritmo lento para procesar el habla, y contrariamente a las creencias populares, necesitan tanto el contenido como la prosodia para comprenderla con éxito”.

Humanos y perros tienen sistemas de procesamiento vocal diferentes y ralentizar el habla al dirigirse al animal puede haber ayudado, en última instancia, a conectar mejor con ellos, sugiere el estudio.

Fuente: EFE

Más contenido de esta sección
Un volumen de plástico de casi tres terrones o cubitos de azúcar es suficiente para matar a un ave marina común (de unos 25-30 centímetros de largo), según constató un estudio científico basado en casi 10.500 autopsias a especies marinas.
Técnicos del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) llegaron hasta el barrio Ykua Naranja de la ciudad de Itauguá, Departamento Central, para el rescate de un ejemplar juvenil de aguará’i, también conocido como zorrito, o con su nombre científico Cerdocyon thous.
El proyecto Felinos del Buen Pastor culminó con el rescate de 41 gatos tras el cierre definitivo del ex Centro Penitenciario para Mujeres Casa del Buen Pastor. Todos los animales fueron castrados, garantizando su bienestar y control poblacional.
Una serpiente coral, una de las especies más venenosas del país, apareció en el patio de una vivienda del barrio Santa María de la ciudad de Concepción causando gran susto a los habitantes de la casa y a los vecinos.
En el marco de una de las fechas conmemorativas del Día del Gato, la Parroquia San Juan Bautista de Santa Fe, Argentina, ofreció por primera vez una ceremonia religiosa comunitaria para bendecir solamente a las mascotas felinas. Logró una importante convocatoria.
Un cachorro de puma, que fue rescatado en Katueté, del Departamento de Canindeyú, recibe ahora atención en el Hospital Faunístico de Hernandarias, de Alto Paraná.