Ellos conformaron un tribunal que fue muy criticado por la opinión pública por su actuar ante un caso de abuso sexual, denunciado en Paraguarí, donde el juez Giménez, que presidía el juicio, habría llamado de mitã’i porã al acusado de abusar sexualmente de su hijastra.
En el juicio condenaron al hombre a dos años con la suspensión de la condena, lo que mucha gente entendió como un beneficio hacia el abusador.
Seis miembros del JEM votaron por el apercibimiento y solo uno votó por la remoción.
Así, los jueces fueron sancionados con una medida menos gravosa y no perderán sus cargos como magistrados.
“Sos un tipo preparado, hablás bien, tenés tu profesión, mitã’i porã”, fueron las expresiones que utilizó el presidente del tribunal, dirigiéndose al condenado que estaba en la misma sala que los familiares de la víctima.