La presidenta de la Asociación Paraguaya de Jubilados y Pensionados Municipales, Rita Duarte Servián, denunció, durante la manifestación realizada frente al local de la Caja Municipal la crítica situación por la que atraviesan miles de jubilados, quienes llevan cinco meses sin percibir sus haberes.
“Desde mayo no cobramos nuestros salarios jubilatorios. La situación es cada vez más angustiante, porque desde hace dos años venimos recibiendo nuestros haberes de manera irregular, siempre con atrasos de tres, cuatro y ahora cinco meses. Y no vemos ninguna señal de que esto vaya a cambiar”, expresó Duarte.
La dirigente sostuvo que la crisis es producto de la mala administración y la corrupción dentro de la Caja, donde –según dijo– los consejeros y directores mantienen sueldos y beneficios elevados, mientras los jubilados deben salir a las calles para reclamar lo que les corresponde. “Son más de 200 funcionarios que cobran sueldos siderales en una institución quebrada. Nosotros, en cambio, estamos desprotegidos”, criticó.
Duarte remarcó que la Asociación a la que representa ya presentó varias notas al presidente de la República, Santiago Peña, solicitando la intervención de la Caja Municipal, pero hasta ahora no obtuvieron respuesta. “No podemos ni siquiera convocar a nuevas elecciones porque las actuales autoridades se mantienen mediante chicanas, atornillados en el cargo. Queremos que el Ejecutivo, el Congreso y la Justicia actúen, porque somos miles de adultos mayores afectados, algunos en estado de salud muy delicado”, advirtió.
Aportaron durante 30 años y hoy están desamparados
Por su parte, Julio Ojeda, vicepresidente de la organización, recordó que muchos jubilados llevan más de 30 años de aportes y hoy se sienten desamparados. “Somos personas mayores, con problemas de salud, y no podemos estar mendigando por las calles para que las autoridades se den cuenta de nuestra situación”, lamentó.
Los dirigentes insisten en que el retraso en el pago de haberes se debe, en parte, a que varias municipalidades –incluida Asunción– mantienen deudas millonarias con la Caja, lo que agrava la falta de recursos. Sin embargo, recalcan que la raíz del problema está en la administración actual, que no toma las medidas necesarias y urgentes para transparentar y sanear las cuentas.
“Esta institución fue creada para dar tranquilidad a los jubilados, pero hoy se ha convertido en una tortura. No queremos más promesas, exigimos soluciones concretas”, concluyó Duarte.