El escenario colorado actual está marcado por la proximidad de las elecciones y esto reconfigura sus fuerzas internas que se pulsean para ganar espacios a partir de las figuras que se presentan como candidatos. El oficialismo caracterizado por su homogeneidad política, hoy está un poco más disperso.
El electoralismo en torno a las municipales del 2026 obligó además a definir quiénes buscan la Presidencia del 2028 y en el Partido Colorado los candidatos son cuatro, por el momento.
Uno de ellos es el vicepresidente, Pedro Alliana, a quien el presidente de la Asociación Nacional Republicana (ANR), Horacio Cartes, elevó como único postulante de Honor Colorado durante la plenaria del movimiento la semana pasada. Fue el mensaje más contundente porque de esta forma cortó cualquier otra aspiración en este sector.
Dejó atrás tanto al ministro de la Vivienda Juan Carlos Baruja como al presidente de la Cámara de Diputados Raúl Latorre, quienes querían sacar del juego a Alliana.
Cartes dijo en su discurso que conversó con Alliana y que este dudó de que sea oportuno ya anunciar su candidatura, pero para el líder de Honor Colorado era el momento de elevar su nombre y aclarar que va a postularse a la presidencia. Se trata de un gesto político orientado a definir el escenario electoral interno.
El otro es Arnoldo Wiens, el ex ministro de Obras, que es candidato de Colorado Añetete, movimiento de Mario Abdo Benítez. Ambos recorren el país para posicionar su figura y confrontar al cartismo, su máximo rival, en la interna rumbo al 2028.
Con Wiens se reactiva Añetete porque este sector dejó de pertenecer a Fuerza Republicana, de Hugo Velázquez.
Entonces, surge el tercer candidato, que es el senador Luis Pettengill, a quien Velázquez decidió apoyar luego de bajar de su aspiración presidencial, impedido por las sanciones de Estados Unidos, que a diferencia de Cartes, no le fueron levantadas.
Velázquez actualmente busca la presidencia de la Junta de Gobierno, con lo que confrontará posiblemente a Cartes en la interna del 2027.
La cuarta candidata es la senadora Lilian Samaniego, quien también quiere ser presidenta y unió su equipo político con el de Velázquez para impulsar la candidatura de Arnaldo Samaniego a la Intendencia de Asunción.
Demostración de fuerza. Un mensaje determinante en esta puja de poder fue el que dio Latorre en torno a las actividades preelectorales. Dejó claro que los ministros del Ejecutivo le deben sus cargos a los políticos que lograron votos y trabajaron en campaña, por lo que pidió que la dirigencia de base sea escuchada.
“Los ministros deben escuchar a la ciudadanía, deben escuchar a la dirigencia de base del partido cuando traen las inquietudes, cuando traen los problemas, que ellos perciben, que sienten y que escuchan en su comunidad”, manifestó. La mayoría de los ministros estuvo ausente en la plenaria. En tanto que asistieron Baruja y Tadeo Rojas, de Desarrollo Social.
Las palabras de Latorre coinciden con los rumores cada vez más fuertes de que habría cambios en el Gabinete, que ya cumplió dos años y medio de gestión. Hay presión sobre todo en torno a la ministra de Salud Teresa Barán, como también sobre el titular de Itaipú Justo Zacarías. Nicanor Duarte Frutos, aliado a HC, suena fuerte como su sucesor.
Asunción, la mayor pulseada del 2026
Con miras a las municipales del 2026, Asunción es el feudo más preciado.
La figura protagónica en el cartismo en torno los comicios es, sin duda, Camilo Pérez, quien fue electo candidato por fuerza de los líderes del comando y a pesar de la resistencia de la dirigencia de base.
Camilo es la figura que fue apoyada por Horacio Cartes, Santiago Peña y Pedro Alliana, y es fruto de una fuerte interna entre el diputado Raúl Latorre y Luis Fernando Bernal, titular de Essap. El diputado quiso posicionar al intendente actual Luis Bello, pero no prendió, por lo que para evitar que Bernal tome fuerza, emprendió negociaciones que derivaron en la elección de Pérez.
Se resolvió así la interna cartista, pero en contrapartida, no se tiene el apoyo de las bases. Este será el principal desafío de Camilo, que llega con una amenaza de la dirigencia de hacer brazos caídos en la campaña en capital.
Del otro lado, la disidencia se prepara, aunque más complicada para enfrentar al cartismo y pelea en su intento de unificar candidatura.
Daniel Centurión sigue en carrera por Colorado Añetete, y Arnaldo Samaniego por Causa Republicana. Este último tiene el respaldo de Fuerza Republicana, por lo que la puja por el cargo será más difícil de resolver.