16 may. 2024

Itaipú pagó USD 46 millones en febrero

La entidad binacional Itaipú anunció que, en febrero pasado, transfirió 46,674 millones de dólares al Estado paraguayo, en el marco del anexo C del Tratado.

De acuerdo con un informe de la Dirección Financiera del lado paraguayo de la entidad, el Tesoro paraguayo recibió USD 45 millones. De esta suma, 21 millones de dólares corresponden a royalties y 24 millones de dólares a cesión de energía.

Menciona que la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) percibió en febrero USD 1,6 millones por resarcimiento de las cargas de administración y supervisión.

El reporte institucional agrega que con los pagos realizados en febrero, el total efectivizado en el año asciende a USD 71 millones. Puntualiza que a esto se deben sumar los 20,2 millones de dólares que fueron adelantados a finales de diciembre del 2019, “desembolso que contribuyó a la dinamización de la economía local”.

Subraya que los pagos efectuados por la Itaipú, tanto en concepto de royalties como por la cesión de energía, son depositados en el Banco Central del Paraguay (BCP), en las cuentas del Ministerio de Hacienda. Precisa que esta cartera es la encargada de la distribución de los recursos provenientes de la explotación del aprovechamiento hidroeléctrico.

La entidad binacional recuerda que los royalties representan una compensación financiera que reciben los Estados de Paraguay y Brasil por el uso del potencial hidráulico del río Paraná para la producción de energía eléctrica en la represa de Itaipú.

Remarca que la cesión de energía es el pago efectuado por el Estado brasileño para acceder a la parcela de la producción que Paraguay no utiliza (excedentes). Parte de los royalties se destinan a las cuentas del Tesoro Nacional para gastos del PGN.


71.000.000
de dólares es la suma que la Itaipú Binacional dice que transfirió en lo que va del año al Estado paraguayo.


Más contenido de esta sección
Demasiados episodios grotescos en una semana como para no dedicarles unas líneas.
Tras las impactantes revelaciones que se obtuvieron con la operación Dakovo, que logró exponer tan explícitamente los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas, sobrevino una situación por de más escandalosa: la implicación de altos militares en actividades criminales. Esta fue sin dudas una dolorosa comprobación del elevado nivel de infiltración del poder mafioso dentro de las instituciones del Estado paraguayo. Además de ser profundamente vergonzoso, esto implica un ataque a la democracia.
El Congreso Nacional rompió récord esta semana con el proyecto de la ley de superintendencia; los senadores tardaron 15 minutos para aprobar; los diputados 11 minutos. En una convulsionada jornada, los diputados también aprobaron ley que suaviza penas para corruptos y los senadores salvaron al cartista Hernán Rivas, acusado de tener un título falso de abogado. Y como les quedó tiempo, también mutilaron la ley de puerta giratoria. Este es el espantoso combo navideño que el Parlamento le ofrece al pueblo paraguayo.
Los impactantes resultados de la operación Dakovo lograron exponer en forma explícita los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas. En nuestro país, logró la detención de más de una decena de personas involucradas en un esquema de tráfico internacional de armas y una nota gravísima, entre los detenidos están un militar de alto rango así como ex funcionarios de la Dimabel. Es muy preocupante la manera en que la mafia y el crimen organizado están socavando nuestra soberanía y nuestra democracia.
No fabricamos armas, pero las comercializamos en cantidad industrial. No producimos cocaína, pero el país es depósito, ruta y puerto de embarque de cantidades industriales que llegan a los principales mercados del mundo.
Eduardo Nakayama abandona el PLRA. Solo y apresuradamente, dicen. Quién sabe. Explica que no ve ninguna posibilidad de que su partido pueda desprenderse de la infiltración cartista. Desde adentro ya no hay nada que hacer, sostiene.