Desde el Poder Ejecutivo se hizo un llamado a una tregua con las comunidades indígenas de todo el país para encaminar una mesa de trabajo y buscar una salida a la crisis ante la movilización que realizaron en repudio a la ley que aumenta las penas a las invasiones de tierras.
El titular del Instituto Paraguayo del Indígena (Indi), Édgar Olmedo, se reunió con el presidente para presentar un informe y posteriormente hizo un llamado al py’a guapy (calma) para buscar un diálogo que pueda dar una salida al reclamo de los nativos.
“Quiero hacer un llamado de paz y de concordia a todas las comunidades indígenas del país para que podamos establecer un diálogo”, sostuvo Olmedo. Este aseguró que los indígenas fueron manipulados y que hubo confusión con el alcance de la ley.
Dijo que cerca de ocho comunidades indígenas están en situación irregular y que representan aproximadamente el 0,7% de la población de los nativos.
Admitió que el proyecto de ley no fue socializado correctamente para que pueda llegar detalladamente a las comunidades indígenas.
“Se ha generado una situación de distorsión y manipulación de la misma al punto que se le ha hecho informaciones que no condicen con la realidad de la ley”, apuntó.
Olmedo sostuvo que la ley puede afectar sus intereses, las ocupaciones o las tenencias de estas tierras que fueron regularmente entregadas y adjudicadas.
“Como también aquellos actos contractuales que fueron generados con contratos de acuerdos y de carácter productivo entre comunidades indígenas y terceros”, argumentó.
Refirió que quedaron sorprendidos con la movilización y asumieron el compromiso de socializar el alcance de la ley mediante trabajo de comunicación.