Los propietarios de una vivienda ubicada cerca del arroyo de Ñemby, a una cuadra de la ruta PY01 (ex-Acceso Sur), vieron con impotencia cuando la fuerza del agua se llevó a sus cuatro vehículos estacionados en su terreno.
La pesadilla de esta familia empezó a las 04:30 de este jueves con el desborde del cauce hídrico en el que desemboca toda la basura y los raudales tras cada intensa lluvia.
La fuerza arrolladora del agua no solo arrasó los rodados, sino todo lo que encontró a su paso, como parte del muro de contención y la estructura del puente, que podría colapsar si no sufre una intervención municipal.
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De los cuatro vehículos que navegaron en el arroyo, solo dos se pudieron recuperar hasta el momento.
Los rodados son tres camionetas de las marcas Toyota (Fortuner e Hilux) y Chevrolet, y un auto Mini Cooper.
La Fortuner y la Hilux pertenecen al esposo e hijo, respectivamente, y no saben dónde fueron a parar. Por ello, piden a la ciudadanía su colaboración para obtener información a través del (0983) 360-984.
La afectada, identificada como Sadi, relató en NPY que la situación fue desesperante y se llenó de impotencia al no poder hacer nada.
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“El agua estuvo a punto de llegar a nuestra casa. Echó el portón de la casa. Cuando yo salí, ya no pudimos hacer nada, más que sentarnos a ver y resguardar a nuestros animales que tenemos en el patio”, relató.
“Era un río con una fuerza brutal. Estoy impresionada todavía porque es muy fuerte lo que pasó. Todo fue tan rápido”, prosiguió.
Otro poblador de la zona señaló que el puente sobre el arroyo es un peligro mortal con cada lluvia que afecta al Departamento Central.
“Siempre cuando llueve grande hay enormes raudales, es como una bajada. Mortal es. Toda el agua se centra en el arroyo”, describió.