El presidente electo, Santiago Peña, que asume hoy su gestión, debió esperar hasta la víspera de su asunción al mando para nombrar al nuevo ministro de Agricultura y Ganadería, cargo que finalmente recayó sobre el médico veterinario Carlos Giménez, quien pidió permiso ante la Cámara de Senadores para asumir en la cartera.
De hecho, Peña pretendía que Santiago Bertoni continuara al frente del MAG, pero la presión ejercida por Juan Carlos Galaverna para instalar a su hijo, Nano Galaverna, en el Senado, pudo más y el presidente electo volvió a ceder y a poner a Giménez al frente de una de las carteras vitales dentro de su gabinete.
El nombrado Carlos Giménez proviene de una vasta carrera como médico veterinario, en la que puso énfasis en la reproducción bovina y ovina a través de la inseminación artificial, que lo llevó a participar de varios cursos, seminarios y a dirigir, incluso, una materia sobre este tema en una universidad turca.
Al conocerse su designación al frente del MAG, Giménez señaló que una de las principales prioridades de su gestión será aumentar la cantidad de cabezas criadas en el país, negando la existencia de las secuelas ambientales que produce la cría de ganado vacuno. “Debemos trabajar respetando nuestra posición: Nosotros somos productores y no dañamos el medioambiente, como quieren hacernos creer. La producción sostenible tiene su base y está en equilibrio con el ecosistema y nosotros tenemos un país bien estructurado en ese sentido, tenemos nuestras leyes, todas las reglas, que a veces no se cumplen, pero eso ya es debilidad de las autoridades de aplicación. Nosotros tenemos nuestras reglas, nosotros cumplimos, y no creo que podamos dañar nuestro medioambiente”, expresó Giménez a Monumental 1080.
Cuando se le insistió de que no consideraría la posibilidad siquiera de disminuir el volumen de producción ganadera, Giménez respondió que “definitivamente no, muy por el contrario”, señaló tajante.
Agregó que al aumentar la producción también se incrementará la posibilidad de abrir mayores mercados a la carne paraguaya. “Nosotros tenemos una orientación hacia Medio Oriente, que es un mercado muy interesante. De hecho, Europa es un mercado interesante para avanzar con la intención de seguir ampliando nuestro mercado. Necesitamos también seguir mejorando algunas cosas en el sector productivo, pero tampoco tenemos que olvidarnos de que en Medio Oriente tenemos un mercado muy atractivo. Yo conversé bastante con empresarios turcos y Turquía es un país muy interesado en absorber nuestra producción”, aseguró Giménez.
En otro orden, expresó que el presidente electo, Santiago Peña, le solicitó especialmente trabajar de cerca con los productores campesinos. “Nuestros campesinos están decepcionados, con la autoestima baja, sin mercado o a mal precio, y el Ministerio debe asumir eso y buscarles mercados”, aseveró el nuevo ministro.